Con confianza plena en sus jugadores. Así se mostró Juan Merino en la rueda de prensa de ayer previa al partido de mañana (16.00 h.) ante el Numancia en El Arcángel. El técnico de La Línea de la Concepción ha visto a unos «jugadores que han demostrado un nivel impresionante en cada día de trabajo» y como prueba fundamental tiene el partido de Oviedo, en el que se mostró «contento por el comportamiento del equipo y la personalidad que tuvo en el trabajo defensivo», aunque eso no quita que «haya cosas que mejorar».

Pero para eso está el entrenador, para corregir los aspectos que crea convenientes y «para dar tranqjuilidad al jugador, pues jugamos en casa en un escenario impresionante ante nuestra afición y debemos dar el 100% de nuestras posibilidades ante un buen equipo». Aun así, «estamos capacitados para ganar».

UN RIVAL CON LA MORAL ALTA

Respecto a su rival de esta jornada, Merino apuntó que el Numancia «es un equipo en una situación bastante buena» ya que hasta el duelo ante el Granada «contaba sus partidos en casa por victorias» y tiene la moral alta después de la victoria copera en Los Pajaritos ante el Málaga.

En lo que va de temporada, el Numancia ha jugado «normalmente» con un 1-4-4-2 o un 1-4-2-3-1, pero en Tenerife pasó a un sistema de centrales. Por tanto, «han trabajado distintos sistemas y aunque trabajamos diferentes conceptos, nosotros debemos saber cómo va a jugar el rival». Un adversario que cuenta con «jugadores que mantienen el bloque defensivo», también dispone de «otros que se encuentran en un buen momento de forma como son Pablo Valcarce, Pere Milla, Manu del Moral o Higinio», entre otros.

«Ellos estuvieron cerca de ganar en Oviedo, aunque el fútbol es así de caprichoso»

Así desgranó Merino a su rival de mañana, uno más de «una categoría muy igualada en la que ya puede ser un equipo el primero o el último que está capacitado para que te puede ganar o le puedas vencer». Y el Córdoba, según su entrenador, está preparado para cumplir con «el primer objetivo que es salir» y «poco a poco iremos escalando posiciones, que es lo importante». Ante esta misión y al igual que lo hiciera público el pasado jueves el centrocampista Edu Ramos, Juan Merino tiene una confianza plena en su método y en sus jugadores pues «están confiados en cómo se está jugando» y «ellos vieron el otro día en Oviedo que estuvieron cerca de ganar el otro día, aunque en muchas ocasiones el fútbol es así de caprichoso».

Para este duelo, el preparador linense mantendrá sus convicciones para intentar conseguir «la mejor recompensa para el jugador y el cuerpo técnico» tras el trabajo de la semana: ganar.

DEFENSOR DEL EQUILIBRIO

Ante los medios, Merino se definió como un técnico al «que le gusta el orden defensivo táctico porque los equipos tienen que saber defender y dónde tienen que defender». Y «aunque el sistema de juego no es innegociable», de momento «jugamos con un 1-4-4-2 y los jugadores están mentalizados en las facetas que estamos trabajando». Como se pudo comprobar en el Carlos Tartiere, este cambio en el juego implica cambios en sus respectivas piezas, en especial el rol que adoptan los puntas.

«Los dos puntas también defienden y atacan aunque tengan distintas versiones»

Ahí Merino quiso destacar el papel que están adoptando los mediapuntas Markovic y Alfaro, ya que los dos puntas, al fin y al cabo, «también defienden y atacan aunque tengan distintas versiones». Por un lado, el serbio «es un jugador que viene mucho a recibir y por eso decidí colocar a Sergi en la izquierda para potenciar nuestro papel ofensivo». Respecto a Alfaro, apuntó que es «un jugador que desequilibra cerca de los centrales, pero que también puede caer banda». En esta zona también subrayó que Javi Lara «no tiene esta profundidad, pero genera posesión por dentro» y «abastece el juego».