Antoine Griezmann se queda en el Atlético de Madrid y no va al Barça. El futbolista francés lo ha anunciado este jueves por la noche de una manera inusual, a través de un documental de máximo culto a su personalidad que ha emitido en exclusiva el canal #0 de Movistar Plus. "He decidido quedarme", ha desvelado justo al final. Falta ver qué hará ahora el Barça con los 100 millones que se ahorra.

El delantero ha puesto fin a un culebrón que ha durado casi una temporada entera. Lo ha hecho antes de su debut con Francia en el Mundial de Rusia, el sábado, tal y como le habría pedido su seleccionador, Didier Deschamps.

En el adelanto del clip, Griezmann anunciaba: "Estaréis hartitos por los comentarios que dicen si me voy, si me quedo, cuánto me dan... Pero la verdad es la que voy a decir ahora". Y lo ha dicho cuando ciertamente empezaba a producirse hartazgo en ambas aficiones y después de casi 31 minutos de documental, titulado 'La decisión'. Emulaba así a Lebron James, que en su día anunció su cambio a los Miami Heat de forma similar. Muy fan de la NBA hasta para esto: convertir en un espectáculo mediático una renovación.

Al final se ha decantado por continuar en el Wanda Metropolitano y desaprovechar la oportunidad de jugar junto a Leo Messi. Y el Barça se queda sin el delantero que ambicionaba el cuerpo técnico y la directiva azulgrana. Griezmann disponía de una cláusula de rescisión de 200 millones de euros que bajaba a 100 a partir del 1 de julio, que es cuando el Barça pretendía anunciar su fichaje.

Todo estaba hablado con la entidad que preside Josep Maria Bartomeu. Incluso su sueldo. Pero tras conquistar la Europa League con el cuadro rojiblanco, todos los estamentos del Atlético iniciaron una ofensiva para retener al jugador. Entre otras cosas le ofrecieron un aumento de ficha muy sustancial, de 23 millones de euros anuales según diversas fuentes, una cantidad a la que el Barça no pensaba llegar para no romper su escala salarial. Y la seducción colchonera se completó con visitas a su casa del Cholo Simeone y pesos pesados del vestuario, tal y como se constata en el documental.

Producción de Piqué

La producción audiovisual se ha convertido en un retrato íntímo del futbolista y un escaparate de su angustia hasta alcanzar la decisión definitiva. El espacio lo ha producido una productora de Gerard Piqué, Kosmos Studios. De ahí que el central del Barça tuiteara a media tarde un emoticono de palomitas anunciando el espacio. Una complicidad y una participación en el show del rechazo por parte del central más que discutibles y que seguramente darán que hablar en los próximos días.

El documental ha seguido durante varios semanas al francés en la tesitura de elegir entre Atlético y Barça. Hay primeros planos desbordando dudas. "Me molesta no tenerlo claro", dice en un pasaje. Se ve incluso a su hermana Maud, que es su agente, contarle los detalles de una conversación con los dirigentes del Barça. "Dicen que es normal que el Atlético de Madrid te ofrezca más dinero pero que tienes que valorar dónde puedes ganar más títulos".

"Yo quiero ganar la Champions. Algo nos falta para ganar. No es mala suerte. Es algo más que falta", señala en un momento determinado. "Qué lío", precisa para reforzar las dudas interiores. Se oye de fondo a su esposa, que es vasca y al parecer muy integrada en Madrid, que parece presionarle para que se quede en el Atlético.

La grabación alcanza su punto culminante un día antes de marcharse a Rusia para disputar el Mundial. Ahí es cuando confiesa su decisión, con música rapera de Drake, primeros planos, cámara lenta, expresión alegre y juvenil, tatuajes al aire, en su espacioso hogar madrileño, convencido aparentemente de la ambición del Atlético por rodearle de jugadores capaces de llevarle a la gloria que dice buscar.