Como adelantó este periódico, Fran Serrano y José Antonio González han firmado con el Granada tras acabar su vinculación con el Córdoba CF. A ellos se ha unido Pablo Vázquez, que al igual que los anteriores fue un jugador indiscutible del Córdoba B en la pasada temporada. Los tres se marcharon del filial blanquiverde tras el fin de su contrato y llegan libres al club granadino.
El Granada está afrontando una enorme reconversión tras el descenso y ha incorporado ya a más de 10 altas, con otras tantas bajas. Con un equipo en construcción, los tres excanteranos del Córdoba pueden tener minutos en el primer equipo.
FRAN SERRANO
El pasado sábado el central cordobés dijo adiós al Córdoba CF tras 15 años en su filial. El central de 22 años llevaba 15 vinculado al club blanquiverde, en el que ha desarrollado toda su carrera deportiva. El cordobés llegó a debutar con el club de su tierra en Primera División, con solo 20 años. En la 2015/16 dejó de contar para el primer equipo y siguió siendo pieza clave del filial.
El pasado curso 2016/17 Fran Serrano jugó 27 partidos con el Córdoba B, pero a sus 22 años ha decidido que su progresión no tenía más recorrido en la entidad califal. Ahora es nuevo jugador del Granada de Oltra y por la forma en que ha sido comunicado puede tener hueco en su primera plantilla.
JOSÉ ANTONIO GONZÁLEZ
Y otro canterano que se ha marchado al Granada es José Antonio González. El mediapunta pontanés de 21 años llegó a la cantera del Córdoba en 2013 para el equipo juvenil, y desde entonces fue ascendiendo hasta hacerse un hombre fundamental del Córdoba B.
La pasada temporada jugó 33 partidos en Segunda B, la mayoría como capitán, en los que marcó 7 goles. Su presencia en la mediapunta dio muchísimo peligro al filial blanquiverde, en el que González era un hombre esencial.
PABLO VÁZQUEZ
Y el tercer jugador que pasa directamente del Córdoba B al Granada B es Pablo Vázquez, central de 22 años nacido en Gandía (Comunidad Valenciana). Al igual que Fran Serrano tuvo un papel muy relevante en la salvación del Córdoba B en la pasada temporada. Ambos fueron la pareja de centrales de un equipo que logró una permanencia holgada (48 puntos) con solo 42 goles en contra.
