En menos de un mes y medio los trabajos sobre los campos realizados por Royalverd han dado sus frutos. El césped de El Arcángel presentó en el último encuentro un aspecto más que aceptable y, a medida que pasen los días, la imagen del manto verde del estadio municipal mejorará aún más. Los 600 kilos de semilla que se le han aplicado, así como otros trabajos como la ayuda con enraizantes, con las lámparas de calor y abono han dado sus frutos en relativamente poco tiempo después de que hubiera una fase especialmente difícil: al cambio de variedad (de la bermuda a la raygrass) se acumularon muchos partidos, ya que los dos primeros duelos ligueros de los blanquiverdes fueron en casa y, posteriormente, soportó la visita de la selección nacional sub 21. Eso ya es pasado y, a partir de ahora, el césped de El Arcángel solo tenderá a mejorar aún más, siempre y cuanto la climatología respete los trabajos de la empresa de mantenimiento.
Algo parecido ha pasado con los campos de la ciudad deportiva. Desde hace ya semanas, el primer equipo celebra sesiones de entrenamiento en el campo pequeño, que hace apenas mes y medio era prácticamente de tierra. La instalación de nuevos aspersores, el arreglo de la bomba de agua, más el cuidado de los operarios han dado sus frutos y, por ejemplo, en el entreno del pasado martes, la imagen del campo pequeño era inmejorable, a pesar de tener en contra muchos peligros: estar en zona agrícola e industrial, los años de vida que tiene la bomba de agua, a pesar de su reciente arreglo, así como la cantidad de animales y alimañas que suelen rondar la instalación de Camino Carbonell. A pesar de todo, ese campo pequeño ya está a pleno rendimiento, lo que unido a la mejora de El Arcángel ha facilitado el avance en el campo grande de la ciudad deportiva. Entre ambos campos de entrenamiento Royalverd ha invertido otros 100 kilos de semilla, además de abono, enraizantes y otros tratamientos contra hongos o gusanos, por lo que el estado de los tres campos principales de trabajo ha dejado de ser un problema.
Otro asunto es la necesidad de campos que tiene el propio club, que ha valorado en los últimos días la posibilidad de hacer regresar al filial a El Arcángel para sus partidos oficiales. Tanto la empresa de mantenimiento como el propio cuerpo técnico del primer equipo han desaconsejado esa decisión, que también se ha valorado para el equipo femenino. Hoy por hoy, la prioridad es mantener los campos de entrenamientos y el de El Arcángel en plenas condiciones para que el Córdoba de Sandoval tenga todos los medios posibles a su disposición, aunque para ello haya que sacrificar tanto los encuentros del segundo equipo como el femenino. De hecho, con este último equipo se pretendió que jugarara sus encuentros en uno de los campos de hierba natural de la ciudad deportiva, determinándose finalmente -al menos, hasta ahora- que siguiera compitiendo en uno de los campos de césped artificial de Camino Carbonell.
Así, y como ejemplo, el primer equipo se ejercitó el martes en el campo pequeño de la ciudad deportiva, ayer miércoles lo hizo en el campo grande y hoy y mañana lo hará en El Arcángel, ya que el sábado por la mañana tiene previsto viajar a Granada, desde donde volará a Palma de Mallorca.
Toda esta problemática ha provocado que en el club, más allá del horizonte final de una nueva ciudad deportiva, no se descarte para la próxima primavera la posibilidad de crear un nuevo campo de césped natural, que iría situado justo al lado del campo grande. Una medida que se sopesa a expensas de lo que pueda ocurrir en un futuro no muy lejano sobre una posible nueva ciudad deportiva del Córdoba.
