El Real Madrid parece haberle encontrado por fin destino al extremo galés Gareth Bale, que tras siete temporadas en el Santiago Bernabéu no ha tenido más remedio que asumir que su ciclo de blanco ya ha acabado y que debe buscar un nuevo destino si no quiere que su cotización futbolística caiga todavía más.

El problema es que el Tottenham ha puesto sobre la mesa una operación delicada para los intereses del club madridista, que dada la situación no tendrá más remedio que aceptar las condiciones que han planteado tanto el jugador como los dirigentes de los Spurs.

El diario inglés The Independent desveló ayer el peculiar acuerdo que se está negociando en estos momentos, que parte de la premisa de que el Tottenham no abonará ni un euro al Real Madrid en concepto de traspaso o cesión. Es decir, Bale jugará gratis la próxima temporada en el club londinense. Lo único que ha logrado incluir el Real Madrid es un bonus por rendimiento que no superará en ningún caso los cinco millones de euros.

En total, incluyendo la ficha del futbolista, los impuestos y este bonus, el club londinense no abonará más de 22 millones de euros por tener a Bale un año en sus filas, tal y como quiere su técnico, José Mourinho.

Solo por un año

El otro problema que tiene la entidad blanca es que el Tottenham no acepta firmar un acuerdo por los dos años que tiene firmados el galés. Es decir, dentro de un año el extremo tendrá que regresar al Santiago Bernabéu, ya que el contrato tampoco incluirá una opción de compra o un segundo año de cesión.

Además, el delantero galés seguirá percibiendo su ficha actual de 15 millones de euros netos anuales. El jugador no está dispuesto a perdonar ni un euro de su salario para volver a jugar y el Tottenham no acepta abonárselo, así que el perjudicado será el club blanco. Florentino Pérez, presidente madridista, no tendrá más remedio que seguir pagando la mitad de su ficha durante la próxima temporada. Según esta información, el interés por Bale surgió durante las negociaciones que ambos clubs están llevando por el lateral Sergio Reguilón, que en breve será oficialmente nuevo jugador de los Spurs después del principio de acuerdo alcanzado.

Mourinho elude el tema

Mientras, el técnico del Tottenham, Mourinho, no quiso hablar ayer del posible fichaje de Bale por el equipo inglés, aunque reconoció su gusto por el atacante galés. «Bale es un jugador del Real Madrid y no hago comentarios sobre jugadores de otros equipos», dijo Mourinho en la rueda de prensa previa al partido de previa de Europa League.

«No, no es mi trabajo contactar con agentes y no quiero hablar de ello, porque no son jugadores de mi equipo», respondió cuando fue preguntado sobre si el Tottenham se ha puesto en contacto con los agentes de Bale. «Incluso antes del United intenté ficharlo para el Madrid, pero no fue posible durante mi tiempo allí, pero el equipo siguió mi instinto y la temporada que me fui lo firmaron. No es un secreto, incluso Bale lo sabe», añadió el técnico portugués.