El suizo Roger Federer comenzó de forma arrolladora pero luego tuvo que salvar dos bolas de partido para vencer al francés Gael Monfils, por 6-0, 4-6 y 7-6 (3) en dos horas, y colocarse en los cuartos de final del Mutua Madrid Open.

La victoria 1.200 de Federer en su carrera estuvo a punto de no producirse. Monfils llegó a dominar por 4-1 en el tercer set, y luego tuvo esas dos oportunidades al resto, pero el suizo jugó entonces al ataque, como si la pista Manolo Santana fuera de hierba en vez de tierra, y arrolló al francés en el desempate.

El partido comenzó mal para Monfils, que en el primer punto cometió una doble falta. Mal augurio para el galo que sucumbió en ese primer parcial, ganando únicamente nueve puntos, y perdiéndolo en tan solo 18 minutos.

El guión parecía escrito, con el suizo lanzado a los cuartos de final, pero el novio de la jugadora ucraniana Elina Svitolina no bajó los brazos, y en una gran reacción, apoyado por un formidable servicio, con el que llegó a alcanzar los 224 kilómetros por hora, se colocó con 4-1 en el segundo parcial que acabó ganando después por 6-4

Las fuerzas del campeón de 20 grandes, que después de dos temporadas desechando la tierra batida de su calendario, regresaba a este territorio, parecían abandonarle y Monfils tomó la confianza suficiente para atacarle, y minar poco a poco su juego, y situarse con ese 4-1 que le hizo soñar con sus terceros cuartos de final en Madrid.

Pero Federer recordó que solo al ataque podría destrozar la ilusión del francés y se entregó a ello. Niveló el parcial y luego salvó una bola de partido con segundo saque para conectar después un gran volea y deshacer la segunda oportunidad. Su revés cortado a la línea le hizo llegar a un desempate que dominó con autoridad.

"Con Gael nunca se puede saber, es un formidable rival. No recuerdo haber perdido un partido ganando el primer set por 6-0", dijo Federer a pie de pista, "perder el segundo me hirió y por eso estoy muy feliz de haber sacado el partido adelante".

Federer se enfrentará en cuartos con el austríaco Dominic Thiem, finalista en las dos últimas ediciones, que antes venció al italiano Fabio Fognini, por 6-4 y 7-5 en una hora y 29 minutos. Mientras, el serbio Novak Djokovic mantuvo su récord contra el francés Jeremy Chardy al vencerle por 6-1 y 7-6 (2).

Djokovic se enfrentará en cuartos con el croata Marin Cilic que por tercera vez esta semana necesitó tres sets para seguir adelante. Esta vez ante el serbio Laslo Djere, por 4-6, 6-3 y 6-2 en dos horas y nueve minutos, con 12 saques directos en su cuenta.

Cilic está sufriendo para pasar ronda. Primero tuvo que agotar los tres parciales contra el eslovaco Martin Klizan, luego ante el alemán Jann-Lennard Struff y este jueves contra Djere, verdugo del argentino Juan Martín del Potro.

También está ya en cuartos de final el suizo Stan Wawrinka, finalista en 2013, que derrotó al japonés Kei Nishikori, subcampeón en la temporada siguiente, por 6-3 y 7-6 (3) en una hora y 35 minutos. El griego Stefanos Tsitsipas, por su parte, mantuvo su nivel de juego con el que está brillando en las dos últimas semanas para vencer al español Fernando Verdasco por 6-3 y 6-4, y lograr por primera vez los cuartos.

OSAKA ENRABIETADA

En el cuadro femenino, la japonesa Naomi Osaka dejó Madrid enrabietada y con su puesto de número uno en el aire. Cedió ante la suiza Belinda Bencic, 18 de la WTA, por 3-6, 6-2 y 7-5 después dos horas y tres minutos.

De haber ganado Osaka, la japonesa reinaría en el circuito una semana más, pero se topó de nuevo con una jugadora que ya le causó ese mismo disgusto este año en Indian Wells.

Osaka, campeona en los dos últimos Grand Slams, terminó frustrada por sus errores, y su raqueta pagó el disgusto golpeándola contra el suelo en varias ocasiones. Bencic, que nunca había superado la primera ronda en Madrid, se impuso después de estar abajo por 5-3 en el último set.

La rumana Simona Halep, que abrió la pista Manolo Santana con victoria ante la australiana Asleigh Barty, por 7-5 y 7-5, tiene ahora la oportunidad de recuperar el cetro. Pero para ello, la dos veces campeona, y cuartofinalista el año pasado, debe ganar la final el sábado.