Si hay dos equipos candidatos al descenso, obviamente aparte del Mirandés, son el Elche y el Gimnástic de Tarragona. Los ilicitanos firmaron en Getafe su peor racha histórica en sus 94 años de existencia al sumar seis derrotas consecutivas. Ni tan siquiera en sus diferentes etapas en Primera o en Segunda B el conjunto franjiverde había sumado media docena de derrotas de manera seguida en casi un siglo de existencia. El relevo de Alberto Toril en el banquillo ilicitano no ha servido, ni mucho menos, de aliciente o acicate para intentar remontar. De hecho, el adiós obligado del cordobés ha empeorado no sólo las sensaciones, sino también los números.

Por su parte, el Gimnástic de Tarragona relevó a su entrenador tras la derrota de los tarraconenses en Vallecas. Juan Merino ha hecho una segunda vuelta entre los mejores, pero no ha sido suficiente para sacar al equipo de los puestos de abajo. De hecho, el entrenador andaluz ya presentó la dimisión hace una semana, que fue desestimada por la directiva grana. Ahora, su relevo, el también exfutbolista Nando, tratará de mantener a los catalanes en la categoría de plata del fútbol español.

Los otros dos rivales claros y candidatos al descenso, Mallorca y Alcorcón viven momentos algo diferentes. Los madrileños arrancaron un valioso empate en Montilivi y han sumado siete de los últimos nueve puntos y reciben en la última jornada a un Lugo que no se jugará nada. Por otra parte, el Mallorca juega dos partidos en casa (Getafe y Numancia) y debe visitar al desahuciado Mirandés. No es una locura que los bermellones aspiren a hacer pleno o, al menos, a sumar siete de esos nueve puntos, lo que les llevaría hasta los 49 puntos. En todo caso, como se preveía, el final de Liga será muy caliente.