El Córdoba continúa en sus trece: intentar inscribir a Pawel Kieszek y a Edu Ramos y, además, incorporar a jugadores para completar la plantilla, algo para lo que está en permanente contacto con LaLiga. Pero, tal y como adelantó ayer este periódico, el club blanquiverde ha comenzado a moverse ante un escenario, más que posible, de que no pueda inscribir ni al portero polaco ni al centrocampista malagueño, dos de los pilares del conjunto blanquiverde en las dos últimas temporadas y cuya sustitución va a ser una papeleta para la dirección deportiva, sobre todo porque esos relevos llegarán por el mínimo interprofesional, algo menos de 80.000 euros.

La situación no ha cambiado, aunque la fecha límite es el viernes de la próxima semana, cuando la ventana estival de fichajes se cierre hasta el 1 de enero. Sabiendo que el tiempo acucia el club blanquiverde está evaluando la posibilidad de ceder a Pawel Kieszek a un equipo portugués, mientras que Edu Ramos también se mantiene en su idea: permanecer bajo la disciplina del club de El Arcángel hasta el 1 de enero, cuando el Córdoba cree poder inscribirlo. El malagueño mostraba ayer su sonrisa durante el entrenamiento en El Arcángel, mientras que el polaco enviaba un mensaje a través de las redes sociales (ver foto). Agarrando una de las picas de entrenamiento a modo de lanza, acompañaba la imagen con un texto en polaco: «¿Hora de cazar? ¿Tal vez cazar a alguien de LaLiga?». Está claro que el portero cordobesista no pierde el sentido del humor y no sería descartable que imite a su compañero Edu Ramos, aunque la falta de actividad competitiva en un portero se nota aún más que en un jugador de campo.

En cualquier caso, la prensa gaditana señalaba ayer que los agentes del malagueño tenían cercano un acuerdo para recalar en el Cádiz en caso de que no pueda ser inscrito por el Córdoba. Un Cádiz que también tiene no pocos problemas con el límite salarial, curiosamente. En todo caso, ya al principio del verano se habló de la posible marcha de Edu Ramos, primero al Málaga, y después, al Cádiz. Lo único cierto es que tanto para los dos jugadores como para el propio club se impone la calma y la espera para comprobar qué ocurre el 31 de agosto, ya que hasta entonces se intentará inscribir a ambos y, en caso contrario, serán los propios futbolistas los que decidan su futuro. Hoy por hoy lo tienen bastante claro, aunque habrá que esperar.