El Atlético de Madrid derrotó por 0-4 al Lleida en una muestra de contundencia ofensiva en la primera parte y con el protagonismo absoluto en la segunda del hispanobrasileño Diego Costa, que regresó con un gol y un susto en forma de fuerte golpe en una rodilla en la misma jugada. El conjunto rojiblanco prácticamente sentenció la eliminatoria de los octavos de final de la Copa.