Philippe Coutinho estará diez días de baja, con lo que no se perderá la final de la Copa del Rey, si todo discurre con normalidad. El partido ante el Valencia será el 25 de mayo. La lesión que le obligó a retirarse antes de que terminara el Barça-Getafe es leve.

Es una elongación en el bíceps femoral de la pierna izquierda, según el parte médico oficial del Barça. Las pruebas que le han efectuado en el Camp Nou han revelado la existencia de ese percance que lo privará del último partido de la temporada. El del siguiente fin de semana, en Eibar, todavía estará de baja.

La situación de Coutinho alivia a Ernesto Valverde, que empezaba a estar preocupado por el alud de lesiones que sufría el Barça. Ousmane Dembélé, con una rotura en el bíceps femoral, pero de la pierna derecha, podría estar disponible pero las previsiones son de que no pueda jugar por los antecedentes del delantero francés, tan propenso a las lesiones musculares. Arthur arrastra molestias en el pubis de las que debería estar recuperado.

Solo hay dos descartados. Luis Suárez, operado el jueves del menisco, y Rafinha, todavía convaleciente de la lesión de ligamentos.