Con solo escuchar el término play off a cualquier seguidor del Córdoba CF se le altera el pulso. Para bien o para mal. El club blanquiverde ha establecido durante las últimas tres década una relación permanente con estas fases de competición, en las que todo se pone en juego: desde el honor hasta el dinero. Cuando se habla de estos cruces como una cuestión de vida o muerte no suena a tópico exagerado. Que se lo cuenten al Córdoba, al que un gol más o menos en el partido adecuado le ha garantizado la supervivencia.

En la temporada 19-20, el cuadro cordobesista se va a quedar mirando cómo son otros los que se baten en este circo de gladiadores en el que pocos triunfan y muchos caen abatidos. Los aficionados vieron cómo los suyos se quedaban fuera de juego tras caer dos veces seguidas en El Arcángel: ante el endeble Algeciras (0-1) y contra el pujante Cartagena (0-2). Los blanquinegros se proclamaron campeones ese día, aunque no lo sabían. Y el Córdoba acabó el curso, también sin ser consciente de ello. Apenas unas horas después, el Gobierno decretó el estado de alarma por el coronavirus. El Cartagena está a 90 minutos de meterse en Segunda y el Córdoba hace planes para su futuro en una Segunda B de cien vecinos. Así, sin más. La vida es un play off.

1991: A pedradas con el Racing

Qué mal rato y qué vergüenza se pasó aquel día. El Córdoba llevaba seis años en Segunda B y precisamente en este curso 90-91 se instauró el sistema de play off. Los blanquiverdes debutaron con petardazo grande. En el primer duelo de la liguilla, el Córdoba CF empató a uno en casa ante el Getafe (que logró su gol a tres minutos del final); en el segundo, perdió en Cartagena (en donde militaba el exdirector deportivo blanquiverde Pedro Cordero), por lo que el tercer duelo de la liguilla era vital. Un equipo para nostálgicos: con Uceda en el banquillo, jugaron Mallo, Paco Jémez, Momparlet, Ortega, Berges, López Murga, Santi Verdú (Rodolfo), Fontán, Montero, Tejero (Justo) y Mantecón,

Visitaba El Arcángel el Racing de Santander y a dos minutos del final el Córdoba CF ganaba 3-1. Los cántabros lograron dos goles en apenas dos minutos y dejaron a los cordobesistas sin posibilidad de luchar por el ascenso (3-3). El partido tuvo el añadido del escándalo arbitral, protagonizado por el murciano Salinas Romero, que echó a Berges a falta de media hora. Un aficionado saltó para agredir al colegiado con un banderín y sobre los jugadores del Racing cayeron piedras en la zona de vestuarios. El Córdoba perdió todos los partidos desde entonces. Quedaron para el recuerdo las imágenes de un joven Paco Jémez llorando en Getafe tras caer en el último minuto ante los azulones.

1995: Escándalo ante el Mensajero

El Córdoba había sido campeón del grupo de Segunda B y estaba embalado, pero empezó regular el play off. Perdió dos de los primeros tres partidos (por 1-0 en Castellón y en Sestao) y Rafael Gómez despidió al entrenador, Crispi, para colocar a Verdugo. Había que ganar los tres partidos... pero solo lo hizo en dos. Perdió en el campo del Mensajero de La Palma en la penúltima jornada. Un 1-0. El excordobesista Márquez, en el equipo isleño, fue expulsado a los 66 minutos. También se fue a la calle Juanito. En un tenso ambiente, hubo incidentes en el césped y en la grada, que daba a una cantera de la que salieron piedras con dirección a los jugadores. El técnico local, Pacuco Rosales, fue después entrenador en El Arcángel.

En aquel infausto partido, el Córdoba alineó a Viña, Algar, Dani, Ballester (Herrero), Juanito, Ángel Rodríguez (Prieto), Pepichi Torres, Paco Pérez, Manolo, Víctor Bermúdez y Quero. El último triunfo en El Arcángel ante el Mensajero no sirvió de nada.

1997: El Depor da una estocada mortal

Un partido que dejó marcada a toda una generación. El Córdoba, campeón del grupo de Segunda B, llevaba casi cuatro meses sin perder un solo partido cuando se enfrentó al filial del Deportivo de la Coruña en El Arcángel un 22 de junio. Si vencía, el ascenso era suyo. Ambiente brutal. Los blanquiverdes llegaban de un empate en Elche que desató la euforia. ¿Y qué pasó? El Depor B se impuso por un increíble 1-4. La horrible visión de aquel suceso inesperado provocó cánticos surrealistas -"¡no quieren subir, no quieren subir!"- y muchos seguidores rompieron el carnet en la misma grada.

Aquel encuentro lo disputaron, con Chato González en el banquillo: Viña, Algar (Xavi Moro), Dani, Juanito, Emilio Vega (Jordi Martínez), Barajas, Pepichi Torres, Gallego, Puche, Loreto y Quini (Quero). El último triunfo en Riazor por 0-1 no sirvió. Y subió el Elche.

Ramos y Óscar Ventaja celebran el ascenso en Cartagena en el 99. A.J. GONZÁLEZ

1999: La madre de todos los ascensos

Por fin pudo sonreír el Córdoba en un play off. Y lo hizo cuando lo tenía todo en contra. El equipo había pasado dificultades económicas -amago de encierro- y hubo relevo en el banquillo: salió Perico Campos y entró Pepe Escalante. Con un equipo repleto de canteranos, el Córdoba perdió en sus dos primeras salidas a los campos de la Leonesa (1-0) y Racing de Ferrol (5-0). Parecía desahuciado, pero...

Tras ganar a la Cultural en El Arcángel, los blanquiverdes se quedaron en un mano a mano con el Cartagena. La situación era esta: a los levantinos les bastaba con sumar un punto de los seis en juego; el Córdoba estaba obligado a ganarlos todos. Después de imponerse por 2-0 visitó el Cartagonova, donde los anfitriones llevaban año y medio sin perder. Se adelantaron los de casa, pero dos golazos en sendas faltas lanzadas por Óscar Ventaja y Ramos sellaron una victoria de leyenda: 1-2 y a Segunda después de 17 años en Segunda B. Aquel día jugaron Leiva, Soria, Juanito, Clavero, Óscar (Lanza), Puche (Espejo), Ramos, Aguado, Rafa Navarro, Requena y Loreto (Nandi).

2007: Pierini, Guzmán... y al Alcoraz

Después de "celebrar" el cincuenta aniversario de su fundación descendiendo en la 2004-05, el Córdoba se encontraba en una situación crítica -una más- de su historia. Se metió en el play off de modo agónico, después de perder los últimos tres duelos de la fase regular y con un ambiente de lo más extraño. Su goleador, Javi Moreno, se había lesionado y no podía particular. Su técnico, Pepe Escalante, estaba más que cuestionado -sentenciado, de hecho- y la crispación era patente.

De los cuatro partidos de ese play off, el Córdoba solamente ganó uno. Le bastó. Empató ante el Pontevedra (0-0 en casa y 2-2 en Pasarón, con formidable doblete de Asen) y le tocó la SD Huesca con la vuelta en El Alcoraz. Había que ganar... y ocurrió. A los dos minutos, el italiano Pierini hizo estallar a la afición con un testarazo para firmar el 1-0 y cerró Guzmán el marcador con el 2-0 en un difícil remate con giro de tobillo. Jugaron David Valle, Pierini, Diego Reyes, Dani, Juan Navarro (Antonio), Esteban (Endika), Arteaga, Javi Flores (Pablo Villa), Guzmán y Asen. En la última jornada, un 1-1 en Huesca le devolvió plaza en Segunda.

Paco Jémez consuela a López Silva tras caer ante el Valladolid en el play off de 2012. A.J. GONZÁLEZ

2012: ¡Somos el Córdoba!

La 11-12, la liga de la redención. Llega otro play off, pero de ascenso a Primera División después de 71 puntos sumados, veinte victorias, solo una derrota en casa -ante el Depor de Oltra, campeón arrasando con 91 puntos- y un estilo de juego brillante.

Al Córdoba de Paco Jémez le tocó el Valladolid de Djukic. En El Arcángel se pudo ver el primer partido de una promoción a Primera en la era moderna, un suceso inédito para las últimas generaciones blanquiverdes. El técnico del Zumbacón alineó a Alberto García, Fernández, Gaspar, Ximo Navarro, Dubarbier (Fede Vico), Caballero (Fuentes), López Silva, López Garai, Borja García, Charles (Patiño) y Pepe Díaz. Acabó 0-0. En el Nuevo Zorrilla, unos días después, 3-0 y adiós a la gloriosa etapa del "salmorejo mecánico""salmorejo mecánico".

2014: Vitamina murciana antes de Las Palmas

Momento cumbre. El Córdoba estaba metido en una espiral de éxito con Chapi Ferrer, que había suplido a Pablo Villa. En las últimas diez jornadas pegó un volantazo: de asomarse al descenso a clasificarse para el play off. No perdió ninguno de los cuatro partidos en las eliminatorias. Y el único que ganó fue en La Condomina, ante un Murcia que se había llevado un 0-0 de El Arcángel.

El Córdoba formó en la vuelta de la semifinal con Juan Carlos, Pinillos, Gunino, Luso, Fran Cruz, Iago Bouzón, Abel Gómez (Campabadal), Juanlu (Raúl Bravo), Pedro, Arturo (López Garai) y Uli Dávila. Abrió el marcador el exmurcianista Pedro, empató el brasileño Wellington y rubricó la victoria por 1-2 el exinternacional Raúl Bravo. De ahí a la final contra la UD Las Palmas. Y de la isla a Primera con el inolvidable toque de Uli en uno de los finales más delirantes en la historia del fútbol español.

Raúl de Tomás conduce elblaón ante dos adversarios del Girona en el play off del 2016. EFE

2016: Girona: la última vez que se asoma

Tras el efímero paso por la élite, firmando varios récords negativos para los anales de la competición profesional en España, el Córdoba se repuso. Cambió a toda la plantilla, fichó a José Luis Oltra y en la 15-16 protagonizó la mejor primera vuelta de todos los tiempos en Segunda para el club. En diciembre era líder. Acabó el campeonato en quinto lugar, con 65 puntos, y quedó emparejado en las semifinales del play off con el Girona.

Oltra, con el equipo muy desgastado, no contaba con su mejor argumento de ataque: Florin Andone se había marchado ya con la selección de Rumanía para la concentración previa a la Eurocopa. En la ida superó a los catalanes en El Arcángel por 2-1 y se plantó en Montilivi a defender su renta. Alineó a Razak, Stankevicius, Deivid, Luso (Pineda), Rodas, Cisma, Nando (Pedro Ríos), Caballero, Raúl de Tomás, Fidel y Xisco (Víctor Pérez).

Se adelantó con un gol de Xisco, pero el exblanquiverde Borja García y Aday, a falta de diez minutos, pusieron el 2-1. El partido se fue a la prórroga. El Córdoba se quedó con diez por expulsión de Stankevicius en el 93 y Cristian Herrera marcó el 3-1 en el minuto 117. Es el momento en el que el club blanquiverde ha estado más cerca del retorno a la élite. Hace de ello poco más de cuatro años.