El Córdoba CF ya se ha puesto manos a la obra para afrontar una nueva semana trascendental en su futuro más inmediato. Los blanquiverdes, desde este instante hasta lo que resta de curso, tendrán que convivir con la presión de la victoria o el fracaso. El primer requisito sine qua non para optar a las tres primeras plazas del subgrupo B del Grupo 4 de Segunda División B reside en ganar el próximo domingo 7 de marzo al Real Murcia en El Arcángel (18.00 horas). Posteriormente tendrán que esperar un tropiezo de un rival directo, aunque nada de ello serviría sin firmar otro "más tres" en su feudo como el cosechado frente al Linares Deportivo.

Isaac Becerra y De las Cuevas, ausentes

El grupo cordobesista arribó a la Ciudad Deportiva sobre las 17.00 horas tras disfrutar de dos días de descanso. De hecho, la última aparición sobre el verde de dichas instalaciones se produjo el pasado viernes con la disputa de un partidillo ante el filial. El mismo se resolvió en favor del primer plantel por 3-0 -goles de Willy Ledesma, Thierry Moutinho y Federico Piovaccari-, pero dejó algunos aspectos negativos que condicionaron este lunes de trabajo. Los más destacados tuvieron a Isaac Becerra y Miguel de las Cuevas de protagonistas.

El cancerbero, al parar un disparo a portería de los pupilos de Germán Crespo, notó unas molestias físicas que le obligaron a abandonar el terreno de juego bajo la ayuda de varios responsables del club. Las evidentes muestras de preocupación del catalán se reflejaron posteriormente en las pruebas iniciales que los servicios médicos le practicaron. En el día de hoy estaba previsto que le hicieran unas nuevas pruebas para valorar su estado. Presumiblemente será baja para el choque ante los pimentoneros, motivo por el cual entrenaron Javi Romero y Juliaan Laverge junto a Edu Frías y Sebas Moyano -preparador de porteros-.

El meta cordobés, que estuvo durante la pretemporada a las órdenes de Juan Sabas en diversas sesiones, es el titular indiscutible del Córdoba CF B y una de las piezas básicas del esquema que volteó la delicada situación clasificatoria de la escuadra. El belga, por su parte, también era uno de los empleados en los meses de verano para el primer equipo y actualmente es el suplente del filial. Hacia la zona de los cancerberos se acercó unos instantes Alfaro bromeando con los tres hombres que allí practicaron. Porque la tónica que reinó en el retorno estuvo marcado por el buen ambiente y por las constantes muestras de optimismo.

El otro ausente en la tarde del lunes fue Miguel de las Cuevas. El extremo se quedó en el estadio junto al fisio del equipo debido a unas molestias musculares en su pierna derecha. Álex Robles y Moussa Sidibé, que tuvieron que ser atendidos el viernes en el partidillo, sí se ejercitaron sin ningún contratiempo.