El Cajasur Córdoba BM volvió al trabajo en la mañana del lunes en Fátima con vistas a preparar el regreso a la Plata masculina de balonmano. Tras ascender el pasado mes de mayo, ahora vuelve a los entrenamientos con el reto de mantenerse, algo que no consiguió en las dos últimas campañas en las que jugó en esta categoría, en la 2009/2010 y en la 2016/2017. Por tanto no se salva en la cancha en la segunda categoría nacional desde la campaña 1992/1993 con Rafa Moreno en el banquillo, hace ya 26 años. Ahora ha empezado a entrenar el Cajasur con Jesús Escribano, un técnico que iniciará su sexta temporada seguida en el banquillo de este equipo.

Cinco han sido las novedades de este conjunto hasta el momento, el portero Ricardo Amérigo, los laterales Domingo Luis Mosquera y Juanlu Moyano, el central Padilla y el pivote Filipe Martins. Moyano y Padilla son dos jugadores formados en el club que ahora han regresado a esta entidad. Mientras seguirán Jorge Nazario, Alberto Requena, Antonio Hidalgo, Nano, Aitor, los porteros Ramón Fuentes y Juan Antonio Romero, Jota Abad, Raúl Pavón, Carlos León y Esteban López.

En la vuelta a los entrenamientos no han estado varios jugadores, siendo la principal ausencia la del lateral Juanlu Moyano, el fichaje principal del club y sobre el cual iba a girar el juego de equipo. Una luxación de hombro, que arrastraba desde los últimos meses de la pasada temporada en el Ángel Ximénez Avia de Asobal, le ha obligado a pasar por el quirófano y a alejarle de las canchas al menos cuatro meses. Tampoco iniciaron la pretemporada Mosquera, por encontrarse con la selección juvenil, y Nazario, por estar disputando el Campeonato Panamericano con Puerto Rico.

La disputa de la fase previa de la Copa Andalucía ante el ARS y el Antequera es el principal reto de este equipo durante la pretemporada.