La última semana del mercado estival de fichajes se presenta frenética, especialmente para el Córdoba, que ya ha respondido a la UD Las Palmas sobre la oferta que el conjunto canario realizó el pasado 14 de agosto de un millón de euros pagadero en cuatro plazos durante en algo más de 12 meses. El presidente del Córdoba, Jesús León, declaró en la entrevista concedida a este periódico que ese millón, con el déficit actual en el límite salarial deportivo, no resolvía los problemas de la entidad blanquiverdes, dependientes de que se realice la operación Guardiola. Mientras que las pocas opciones que restan para que se realice el traspaso del jumillano, en una operación en la que está atado el Córdoba por el Getafe, el club de El Arcángel continúa moviéndose y, a pesar de la negativa inicial a los canarios, las negociaciones han ido por otros derroteros después de su insistencia, posición muy distante de las declaraciones realizadas la semana pasada por su presidente, Miguel Ángel Ramírez, en las que aseguró que por Javi Galán no pagarían «ni un millón ni 500.000 euros». Según fuentes de la negociación, la última propuesta desde El Arcángel, a la que debe responder Las Palmas en los próximos días, pasa por una cantidad en metálico, que estaría entre los 600.000 y los 700.000 euros y el traspaso al Córdoba del delantero Erik Expósito.

El ariete, que ya debutó la pasada campaña en Primera (en la que jugó casi una decena de partidos anotando un gol) a las órdenes de Paco Jémez, supera los 1,90 de altura y se formó en la cantera del Málaga. Aunque nacido en Santa Cruz de Tenerife, Expósito es una de las perlas de futuro de Las Palmas (ayer jugó con su filial ante el Castilla), ya que con 21 años anotó ocho goles en 24 partidos en Segunda B. El único gol que anotó en Primera tiene mucha historia, ya que lo hizo contra el Celta en Balaídos, estadio en el que marcó el primer gol de su historia el abuelo del delantero amarillo, Graciliano, con la camiseta celeste y con Jémez en el banquillo. Una operación nada fácil, pero que deja a las claras que la entidad blanquiverde está inmersa de lleno en la negociación.

Los movimientos en El Arcángel podrían ir encaminados a sacar el mayor rédito posible a la salida del futbolista pacense, contar con Quezada para el lateral o carrilero izquierdo y firmar a otro jugador, en este caso polivalente, que pueda actuar tanto en la demarcación en la que juega el jugador del Castilla como en otra. En todo caso, la hipotética salida de Javi Galán supondría la llegada de otro jugador, aunque en el club valoran bien el perfil de futbolista que debería llegar en caso de que, finalmente, Javi Galán salga. El Córdoba intenta que sea lo más rentable posible.