La presentación del organigrama técnico del Córdoba CF, al que solamente le falta definir las figuras de los entrenadores del primer equipo -será Juan Sabas, con total seguridad- y del filial -alguien "ilusionante", tras la agria despedida a Diego Delgado-, sirvió para que la entidad expusiera aún con trazo grueso el ideario que marcará su reposicionamiento en el mapa del fútbol español. A través del consejero Adrián Fernández, prudente en las formas pero punzante en el fondo, el club esbozó ante los medios las líneas maestras de un proyecto que acude a viejas recetas para aferrarse a los nuevos tiempos.

Todo quedará definido en los juzgados, donde se dirimen asuntos de hondo calado como la validez de la venta del club -Infinity no se plantea un escenario distinto a la firmeza del auto de Fuentes por parte del nuevo magistrado que se hará cargo: Caballero- o la autorización por parte de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) del traspaso de derechos del Córdoba CF SAD a Unión Futbolística Cordobesa para seguir compitiendo en Segunda B. Mientras todo eso se cuece, entre los muros de El Arcángel ya se trabaja sobre un único plan: salir en Segunda B y pelear por el ascenso a Segunda División. No hay más.

El presupuesto: "Lo más caro no basta"

El Córdoba estaba trabajando "desde el minuto cero" sobre dos escenarios: uno en Segunda y otro en Segunda B. Al final, el cierre de la competición dejó a los blanquiverdes fuera de cualquier opción en este mismo año. Todo se apostará al siguiente y, según Adrián Fernández, sin tirar la casa por la ventaja porque no están los tiempos para dispendios. Que, en cualquier caso, no considera "necesarios".

"El equipo será muy ilusionante y no hace falta tener el presupuesto más alto para meterse en el play off y ascender; hay ejemplos de equipos que están funcionando", dijo el consejero, que se desmarcó sobre cifras. Todo depende.

Fernández desveló que manejan un plan comercial "teniendo en cuenta que habrá partidos a puerta cerrada" y que trabajan para conseguir un patrocinador para la camiseta, aunque "la Segunda B es compleja" porque "al estar fuera del fútbol profesional y las televisiones nacionales", el impacto es "totalmente local". "Es difícil, pero no imposible", recalcó. Además, explicó que tienen esperanzas en la entrada de firmas locales que "se echaban para atrás antes por la gestión que había", que no les animaba a poner dinero.

La cantera: "Es donde más vamos a invertir"

Fernández dijo que después de este "año tan raro", la intención es "competir al máximo nivel y no estar en media tabla o luchando por salvarnos de bajar en Tercera". El consejero apunta la "pelea por el ascenso" como objetivo de un filial que se salvó por el cierre de las competiciones y que tendrá en pocos días al sustituto de Diego Delgado en el banquillo. "Buscamos una plantilla con cinco o seis jugadores que puedan dar el salto al primer equipo, jóvenes que puedan servir y que den un plus, una cantera que apriete arriba", añadió.

La inversión económica en la cantera será "la más alta, proporcionalmente" y una señal de la importancia que se le va a dar es que "tendrá dos personas en el área" cuando "en el primer equipo habrá una". "Hemos traído a profesionales que van a trabajar en la cantera, porque ahí está el futuro del club y es por lo que vamos a apostar", explicó el consejero, apostillando que no se refería a jugadores, sino a "todo", con más inversión "en desplazamientos, en ropa, en servicios médicos, en fisios y, en general, a una mejor atención a nuestros futbolistas jóvenes". ¿Y el femenino? "No puedo decir nada aún, está en cocina", apuntó enigmático.

Los fichajes: "Vamos a traer entre ocho y diez"

Las primeras cuatro salidas oficiales -Imanol García, Fidel Escobar, José Antonio González y Chus Herrero- no van a ser las únicas. "Estamos estudiando caso por caso y saldrán algunos más, pero hay cosas que aún no están claras sobre los cedidos", expresó Fernández.

"Estaremos entre los ocho y diez fichajes, habrá una reforma importante en la plantilla", dijo, insistiendo en que la prioridad es mejorar lo que había antes. "Nos encontramos una plantilla descompensada y desequilibrada, lo que intentaremos es tener buenos profesionales en todos los puestos y que el equipo pueda adaptarse a distintos sistemas", manifestó.

Sobre la posibilidad de renegociar a la baja los salarios de algunos jugadores con contrato, Adrián Fernández sostuvo que, si se hace, no será porque "se considere excesivo", ya que "hay compromisos que están ahí". "Otra cosa es lo que nos llega con el covid, qué tipo de competición nos vamos a encontrar; habrá efectos económicos y todos nos vamos a tener que apretar el cinturon, y yo me incluyo", señaló.

Los socios: "Tenemos un plan agresivo"

Si los partidos, como se prevé, serán a puerta cerrada, ¿qué ocurrirá con los abonados? "Espero que muy pronto, en unas semanas, podamos dar alguna pincelada de lo que tenemos preparado para el tema de los socios", desveló el consejero, que anunció un "plan de abonos muy agresivo, muy innovador, que nunca se ha hecho aquí".

El reto: "Subir sin pasar por la Pro"

El Córdoba en Segunda B es un club deficitario en lo económico y en lo emocional. Su presencia no tiene otro sentido que buscar la pronta salida de esta división. Las circunstancias, con un final de campaña rodeado de incógnitas y un porvenir en el que se atisba una división intermedia -la Segunda B Pro-, lo condicionan todo.

"La verdad es que estamos bastante perdidos, como todo el mundo, esperando a ver qué pasa", dijo Fernández, quien "como opinión personal" expresó que no tiene claro "si se va a jugar más o no", porque además "no hay ninguna notificación oficial".

Fernández se mostró cortés con el plan de Rubiales, criticado hasta por aquellos a quienes presuntamente beneficia. "A ver, yo creo que la Federación hace las cosas con la mejor intención, le pese a quien le pese, incluidos nosotros", aclaró sobre el play off exprés. De la futura liga por encima de la actual Segunda B dijo que le seduce "porque refuerza la marca y atrae a patrocinadores, al ser más profesionalizada y, por lo tanto, adecuada para un club del nivel del Córdoba". Ahora bien, lo que está más cerca es un campeonato de cinco grupos y cien clubes que "sinceramente, no me gusta", pero "es lo que tenemos y habrá que competir con una idea: llegar a Segunda y no pasar por la Pro".