Carrión, la afición y los rivales

Su recorrido en el Córdoba puede hacerle daño en el futuro

Cumplió una vuelta en Getafe, 21 partidos en los que ha sumado 23 puntos. El séptimo peor equipo de la Liga bajo su mando, a dos del descenso en su etapa y con unas cifras defensivas y atacantes que dan miedo. Es complicado entender que saliera de inicio sin delantero cuando el centro del campo trabajó defensivamente igual -de mal- en la presión que en partidos anteriores. Cada semana que pasa transmite mayor soledad. La afición no está con él. Gran parte del vestuario, tampoco. Sólo le sostiene el máximo accionista. Y eso puede hacerle daño en el futuro.

DESPLAZADOS / UN CENTENAR

Fueron para celebrar la sorpresa y volvieron con el palo de siempre

Algo más de un centenar de aficionados blanquiverdes se dieron cita en Getafe. Su equipo había sumado un punto de 24 disputados lejos de El Arcángel. Enfrente tenían a un candidato -este sí- al ascenso que sólo había caído en el Coliseum en una ocasión, hace ya ocho meses. Pero ni eso les echó para atrás. Sabedores de que el Córdoba siempre da ese golpe ilógico y cuando menos se espera, acudieron con la esperanza de celebrar la sorpresa de cada temporada. Pero se ve que en esta campaña no toca ni eso. Alguna no quiso ni que los jugadores saludaran al final del encuentro.

RIVALES / BUSCAR A OTRO AÚN MÁS FLOJO

La esperanza empieza a estar en que otros sumen menos

Vista la incapacidad que demuestra esta plantilla, las esperanzas blanquiverdes pasan por que otros rivales por la permanencia estén aún peor que este Córdoba, que ha sumado dos de los últimos nueve puntos disputados. El Elche está en un profundo bache y el Almería frenó su recuperación al caer en casa ante el Valladolid. Visto ese encefalograma plano del Córdoba, al que no se ve capaz ahora mismo de sumar siete u ocho puntos, todo pasa por que sus adversarios sumen poco, muy poco, para que la salvación esté más barata de lo que apunta en la actualidad.