Ayer se celebró una nueva reunión entre el Grupo Tremon y el Ayuntamiento para intentar avanzar en el futuro del plan que se pretende promover para la zona en la que actualmente entrena el Córdoba. La actual ciudad deportiva, de la que es propietaria la firma inmobiliaria, vive en la actualidad un proceso legal complicado, que arranca desde que la anterior propiedad hiciera oídos sordos a la solicitud de Tremon para desalojar los terrenos. Ante la falta de respuesta, el proceso terminó con la orden del juez por el que se obligaba a la entidad blanquiverde a desalojar la misma y, mientras tanto, la familia González vendió el club.

La cita entre el Consistorio y Tremon se desarrolló en buena sintonía, aportando ideas de futuro que puedan servir y encajar en la normativa, aunque aún queda mucho por andar en este aspecto. Por su parte, en la entidad blanquiverde también están pendientes de El Arcángel, al que se le han hecho en estos días pequeños trabajos para ampliar el palco una línea más y reducir el palco privado que ocupaba la anterior propiedad y que ahora está a cargo de la Fundación.

La buena sintonía también se extiende al Córdoba, ya que la llegada de Jesús León supuso una reinstauración de relaciones, tanto con el Ayuntamiento como con el resto de instituciones.