Josep Maria Bartomeu afrontó por segunda vez un batacazo monumental. "Otro palo que ya sufrimos el año pasado", admitió en su comparecencia, antes de comentar que le sabía "muy mal" la eliminación por los aficionados que habían viajado a Liverpool

"No tengo explicación", repitió varias veces el presidente del Barça, de la primera y definitiva derrota del equipo en la actual edición de la Champions. El once de Valverde se hundió otra vez pese al 3-0 de la ida. Bartomeu felicitó al Liverpool, pero sin eludir la responsabilidad del propio equipo.

"Habrá muchas explicaciones en caliente y habrá tiempo para reflexionar", dijo, mordiéndose la lengua para no excederse. El año pasado, tras la eliminación de Roma, la continuidad de Valverde pendió de un hilo. El triunfo sobre el Sevilla en la final de la Copa del Rey le salvó. Puede suceder lo mismo. "Ahora toca levantar el ánimo de los jugadores y de los técnicos y pensar que hay una final dentro de unos días", recordó, sin querer analizar la alineación de Valverde, la misma que la del partido de ida.

Bartomeu, como el entrenador, tampoco supo definir o interpretar la jugada del cuarto gol, en un córner con todos los jugadores de espaldas al lanzamiento de Alexander-Arnold. "Había cierto despiste, desorientación", suponía, antes de hablar de la "nefasta" jornada europea, mucho grave por haberse repetido.