LaLiga dio a conocer este miércoles el reparto de los derechos de televisión de la temporada pasada tanto en Primera como en Segunda División. El Barça fue el club que más recaudó de la Liga Santander 2018/19. El conjunto azulgrana, campeón de la pasada edición, percibió 166,5 millones de euros en derechos televisivos, superando en este aspecto al Real Madrid, que cobró 155,3 y al Atlético, que percibió 119,2.

Ese fue el podio de los clubs que superaron los 100 millones. Por detrás, se sitúan el Sevilla, con 80,1 millones de euros; el Valencia, con 78,7 millones y el Villarreal, con 74,3. El club que menos ingresó fue el Huesca, con 44,2. En total se repartieron 1.420,4 millones.

Menos distancia

Por otro lado, la diferencia entre el club que más ingresa por derechos televisivos y el que menos en Primera se ha reducido dos tercios en cinco años, de las 9 veces más entre el de mayores ingresos y de menores en la temporada 2014-15, a las 3,5 veces de la pasada campaña 2018-19, según explicó la patronal.

Esta distancia, que se ha ido reduciendo progresivamente en este periodo (5,1 veces en la 2015/16; 3,7 veces en la 2016/17; 3,6 veces en la 2017/18 y 3,5 veces la pasada temporada), se debe al modelo de reparto de los derechos audiovisuales establecido por el Real Decreto-ley 5/2015 de venta centralizada, que establece como máximo esas 3,5 veces entre el que más ingresa y el que menos.

"Más igualada y competitiva"

"El resultado de esta distribución ha permitido tener clubs sostenibles financieramente, hacer una competición más igualada y más competitiva y seguir siendo competitivos en Europa. El Real Decreto estableció ese límite y se cumple por el mero hecho de haber incrementado los ingresos", explicó el director de Operaciones de LaLiga, José Guerra, en un encuentro con medios de comunicación.

La diferencia entre los clubes de LaLiga Smartbank (Segunda División) fue en la pasada temporada de 1,9 veces entre el equipo que más ingresó y el que menos, una distancia que se ha mantenido estable en los últimos años y que depende mucho del tamaño del equipo que desciende cada temporada, ya que una parte de las ganancias audiovisuales se reparte por las taquillas y abonados.