Pocas canchas encontrará el Barça tan propicias para coger impulso en Europa como la del Gran Canaria, un equipo que debuta en la Euroliga. Pero el equipo azulgrana no lo supo aprovechar y sufrió una dolorosa derrota que, seguramente, dejará secuelas (87-86). Dos tiros libres de Hannah, a tres segundos del final, cerraron un partido que el equipo de Pesic no supo controlar a pesar de una espléndida actuación de Kuric (24 puntos) y de dominarlo durante muchos minutos. Por mucho que en la Liga Endesa, el equipo azulgrana se mantenga invicto después de cuatro jornadas, la situación parece que le sobrepasa cuando llega la competición europea. Se descompuso en la cancha del CSKA, en su debut, y volvió a hacerlo este martes en Las Palmas. Dos partidos de Euroliga, dos derrotas. Las pérdidas de balón en la fase decivisva y los errores, como el de Singleton en el último ataque, estiraron la pesadilla europea de los de Pesic.