El Barça Lassa afronta este jueves (21.00 horas) el difícil reto de ganar a domicilio al Real Madrid con el objetivo de reencontrarse con el triunfo en la Euroliga después de dos tropiezos consecutivos contra el Fenerbahce de Estambul y el Buducnost.

El desafío del equipo de Svetislav Pesic es mayúsculo. Enfrente se verá las caras con un rival que solo ha perdido un encuentro de los seis que ha disputado como local -contra el CSKA de Moscú (88-93)- y que en casa anota más de 90 puntos por partido.

No obstante, la plantilla azulgrana se aferra al resultado del primer clásico del curso que se disputó en el Palau Blaugrana, donde los locales consiguieron un triunfo incontestable en la Liga Endesa con una gran actuación del alero Kyle Kuric desde el perímetro.

Precisamente en las últimas dos derrotas europeas, los cañoneros azulgrana han anotado 11 triples de 42 intentos, unas cifras que necesita mejorar si mañana quiere tener opciones de victoria en el Wizink Center.

Aunque más allá del acierto exterior, la intensidad defensiva azulgrana se prevé como una de las claves del encuentro. Si el Barcelona es capaz de frenar las transiciones del equipo blanco, sus opciones aumentarán.

Asimismo, el control del rebote se presenta como otro de los elementos a tener en cuenta. El Real Madrid es el equipo de la competición que más rebotes captura (37,2 de media), una cifra superior si se compara con los guarismos del Barcelona (35,72), que en las últimas dos derrotas tan solo ha capturada ocho rebotes ofensivos.

Por ello, los focos en la pintura estarán focalizados en el duelo entre Ante Tomic y Walter Tavares. El pívot croata (12,4 puntos y 4,8 rebotes por partido en la Euroliga) se ha convertido en un puntal en los esquemas de Svetislav Pesic. El Barça carbura en la Euroliga cuando el interior balcánico es capaz de sumar dobles dígitos.

Los precedentes no son favorables para el Barcelona. De hecho, desde que se instauró el formato de liga regular (2016-17) en la Euroliga el Real Madrid ha ganado los cuatro enfrentamientos directos con el equipo azulgrana.

Una dinámica que el equipo de Pesic, séptimo con un balance de 6 victorias y cinco derrotas, necesita revertir.