Inmerso en una vorágine tremenda de partidos, el Barcelona Lassa vuelve a jugar este martes (21.00 horas, Esport3) en la tercera jornada de la Euroliga. El cuadro azulgrana se mide con el Zalgiris de Sarunas Jasikevicius, el técnico que fue tanteado por el club antes de fichar a Sito Alonso como sustituto de Georgios Bartzokas.

Las derrotas sufridas ante el Estrella Roja (90-82), el viernes en Belgrado, y Estudiantes (80-70), el domingo en Madrid, han agitado el esperanzador comienzo del Barça. No deja de ser lógico en un proyecto nuevo que aún necesita tiempo para consolidarse. La idea de Sito Alonso es recuperar el camino del triunfo ante un rival que también lleva una victoria y un tropiezo en clasificación.

"Tenemos que encontrar una línea de intensidad continua. Hay que trabajar, sufrir y pelear", comentó ayer el preparador azulgrana. "De la primera a la segunda derrota perdimos las cosas básicas que mejor hacemos. El partido contra el Estrella Roja era complicado y estuvimos cerca de la victoria, pero en Madrid no tuvimos la actitud grupal para lograr nuestro objetivo", añadió.

Evitar la relajación

Alonso ha concienciado a sus hombres para evitar las lagunas que han hundido al equipo en los últimos duelos. Evitar esa "relajación mental" es el primer paso para enderezar el rumbo. Este martes espera un rival exigente, "un Zalgiris muy competitivo, con un carácter como el que tiene su entrenador".

El técnico azulgrana destacó la seriedad del bloque lituano, en el que destaca la versatilidad de sus interiores Jankunas y White. Seraphin (20 puntos y 6 rebotes de media), Tomic y Oriola serán los encargados de frenarlos bajo la dirección de Heurtel, que promedia 12 puntos y 9,5 asistencias en la Euroliga. Entre todos intentarán amargar un nuevo regreso de Jasikevicius al Palau.