Alrededor de 20 minutos después de comenzar el entrenamiento de ayer, y cuando aún se encontraban los porteros ejercitándose aparte, saltaron las alarmas. Kieszek se dolía de su mano derecha y se retiraba del terreno de juego de la Ciudad Deportiva, ante visibles muestras de dolor.

Los fisioterapeutas del club acudieron para ver el estado de su mano y Pawel decidió no continuar, por lo que se llamó al tercer portero del filial, Pedro Luis, que entrenaba en el campo de al lado con el «B», para que le supliese.

Tras varios minutos sentado fuera del terreno de juego y charlando con los fisios, finalmente Kieszek se incorporó de nuevo, aunque ya no realizó ejercicios propios de un guardameta, sino que acompañó a Piovaccari, que en ese momento terminaba su entrenamiento con disparos.

Aunque se retiró antes que sus compañeros camino del autobús del equipo, fuentes del club aseguran que fue «solo un susto, un golpe sin más», y que la lesión no reviste de gravedad, lo que habrá de comprobarse en los próximos días.

EL «SUSTO» DE KIESZEK

Y es que la imagen asusta y de qué manera al cordobesismo. Pawel Kieszek ha sido el mejor del Córdoba en los últimos partidos, y sin ir más lejos realizó varias paradas salvadoras que fueron vitales para conseguir los últimos dos puntos ante Mallorca y Mirandés.

En el Iberostar Estadi su actuación fue heroica. Desde el minuto 80 el equipo se echó atrás para defender el empate y el polaco tuvo que hacer un recital de paradas para lograrlo. Primero, una estirada sensacional para sacar junto al poste derecho un remate de Lekic que medio estadio balear ya cantaba como gol. Luego una atajada de puro reflejo y veteranía de nuevo ante Lekic, que disparó en el área pequeña y ante el que no se arrugó Pawel.

Y después, ya en el descuento, tuvo que despejar un potente disparo desde fuera del área de Angeliño. El pasado domingo de nuevo tuvo que hacer gala de sus mejores dotes para evitar que el empate ante el Mirandés hubiese acabado en algo peor. Su parada más importante, ante Sangalli, evitó una igualada que se veía venir y acabó llegando cuando más duele, en el descuento.

EL RECUERDO DE RAZAK

Hay que recordar que cuando Carrión decidió sentar a Kieszek y darle la titularidad a Razak, la decisión fue muy discutida. El portero ghanés no respondió con buenas actuaciones a la responsabilidad dada por el técnico barcelonés, y aún recuerda la afición cordobesista actuaciones como ante el Levante.

En Valencia, en su primera oportunidad para defender la portería blanquiverde, un mal control fuera del área le llevó a hacer una falta que posteriormente acabó en gol. Y ante el Nàstic en Tarragona, con el equipo ganando 0-1 y con un hombre menos, se tragó un flojo y lejano remate de cabeza de Perone, lo que llevó a la remontada de los catalanes y la derrota del Córdoba. Tres partidos fueron suficientes. Tras ello, Carrión volvió a dar la confianza a Kieszek, que con sus actuaciones ha refrendado ser fundamental para el equipo en la recta final de temporada.

Y si la comparación se hace simplemente con estadísticas, las cifras también dan la razón al polaco: Contando con los de Copa, Razak ha encajado 8 goles en 5 partidos, con una media de 1,6 tantos por encuentro. Kieszek, por su parte, ha tenido que recoger en 42 ocasiones la bola de su red en un total de 35 partidos jugados, es decir, una media de 1,2 goles por partido.

Si finalmente el susto de Kieszek se convierte en drama y la lesión en la mano le imposibilita viajar a Getafe, el Córdoba tendrá delante a otro guardameta, el de los azulones, cuyas cifras también son importantes.

Alberto García, que defendió durante cuatro temporadas la portería del Córdoba y disputó una fase de play-off de ascenso, en la temporada 11/12, se ha hecho con la titularidad en Getafe, desplazando a un portero de la experiencia de Guaita. El barcelonés ha jugado 32 partidos con el Getafe, y en 12 de ellos ha dejado su portería a cero.

Gracias a ello, los madrileños son el quinto equipo menos goleado. El duelo Razak-Alberto García haría que el partido del próximo domingo (a las 18:00 en el Coliseum Alfonso Pérez) comenzase ya desnivelado a favor de los locales.

PIOVACCARI SE APUNTA

Pero no todo fueron noticias negativas en el entrenamiento de ayer. Piovaccari saltó junto al grupo y completó más de la mitad del entrenamiento a buen ritmo antes de culminar la sesión con disparos a portería. Se cumplen cuatro semanas desde su lesión de tobillo ante el Elche, y el delantero italiano avanza en su recuperación para estar disponible lo antes posible para Carrión. Si continúa la progresión en los próximos entrenamientos, su presencia en el viaje a Getafe es más que posible.

Le vendría de perlas a Carrión la recuperación total de Piovaccari, ya que la sequía de Rodri dura ya siete partidos y han tenido que ser centrocampistas y defensas los que aporten los goles que la delantera no convierte.

En el capítulo de altas y bajas destacó ayer la presencia hasta el final de la sesión de Caballero con el grupo. El centrocampista parece totalmente recuperado de sus dolencias y si no media recaída estará disponible si Carrión decide convocarle.

El que parece que no termina de reponerse de las lesiones es Héctor Rodas. Aquejado de diversas dolencias en las últimas semanas, se entrenó ayer en solitario en el estadio, por «molestias en la rodilla» según el club, por lo que es duda para el partido en Getafe.