Alberto Martínez, el nuevo presidente de la Agrupación de Peñas Cordobesistas, elegido el pasado sábado en asamblea general, se pone como objetivo normalizar la relación con el Córdoba. Y es que actualmente "no son no todo lo buenas que nos gustaría, pero vemos que hay opción de mejora para llegar a buen término", señalaba ayer el nuevo directivo para este periódico. "Tenemos comunicación con el club, especialmente por el tema de los desplazamientos y la seguridad, pero vemos que podemos ir más allá". En este sentido, "durante estos años el Córdoba se ha centrado en la faceta deportiva y económica. Eran los primeros fuegos que había que apagar y se dejó un poco de lado la relación con las peñas. Una vez asentado el tema económico y deportivo es hora de que vuelvan la vista a su masa social. Ya se hace, pero más".

Martínez llevaba al frente de la Peña Sangre Blanquiverde desde su fundación en 2009 y ahora se ha hecho con la presidencia de la Agrupación, que engloba a más del 80% de las peñas oficiales del Córdoba. Este catalán de acogida agradece a la anterior directiva el trabajo realizado, aunque afirma que "somos una directiva totalmente nueva, totalmente vírgenes, y queremos desarrollar nuestro propio proyecto".