No hay unanimidad en cuanto a la enseñanza del pichón por parte de los colombicultores. La primera controversia se da en el tiempo de inicio de la enseñanza. Algunos prefieren comenzar con el entrenamiento desde pichón mientras que otros entienden que se ha dar los primeros cinco meses de margen.

El palomo debe ser consciente de cuál es su cajón y mantener un entrenamiento físico diario, como en cualquier otro deporte.

Para hacer una buena enseñanza hay que tener una paloma en plenitud de celo, bien adiestrada y tener al palomo varios días reconociendo el palomar, con el cajón abierto y dejar la paloma junto a él. Entonces queda preparado para una suelta. La paloma, bien preparada, se encarga de devolverlo al palomar.