El Salón Rico de la ciudad califal de Medina Azahara podrá ser visitado en grupos reducidos y de forma guiada a partir del 22 de diciembre y hasta el 5 de enero, y serán unas 2.000 las personas que tengan la posibilidad de entrar y conocerlo todo sobre este recinto, que lleva cerrado desde el año 2009 debido a las obras de restauración, que ahora se podrán conocer in situ.

El consejero de Cultura en funciones, Miguel Ángel Vázquez, dio a conocer esta iniciativa en Córdoba apenas hace un mes y ahora se ha sabido el día en que comenzarán estas visitas, que se llevarán a cabo desde las 10.00 hasta las 13.45 horas en grupos de treinta personas que, durante 45 minutos, recibirán las explicaciones de los expertos que trabajan en el interior del recinto, todo ello hasta el 5 de enero, exceptuando los lunes y los días de Navidad y Año Nuevo. Los interesados en esta actividad deben inscribirse en la plataforma de reservas de la Consejería de Cultura, aunque para ello habrá que esperar al día 18.

«Ya dijimos en su día que queríamos abrir el Salón Rico antes de que acabara el año, para que la gente pudiera ver cómo va la evolución de los trabajos que se están llevado a cabo», apuntó el consejero cuando anunció que en las vísperas de las fiestas navideñas se podría acceder al Salón Rico, eso sí, en condiciones de seguridad.

Así, estos visitantes podrán conocer de primera mano cómo se actúa en esta estancia, en la que se está trabajando en dos nuevas actuaciones en cuanto a la recuperación del pavimento original y el acristalamiento para separar la zona del jardín. Estos dos nuevos trabajos se añaden a los que ya se vienen haciendo para poner en valor este preciado recinto de la ciudad palatina.

Según señaló Vázquez, aunque aún se están resolviendo los asuntos burocráticos que quedan pendientes para desarrollar la segunda fase de la restauración del Salón Rico, «esto no obstaculiza la posibilidad de hacer nuevas actuaciones que nos permitan ir complementando y reforzando su valor patrimonial». Desde el punto de vista artístico, esta estancia de la ciudad califal, con una planta basilical de tres naves, es una de las más significativas del conjunto arqueológico y pertenece al Palacio de Abderramán, aunque que no es un único espacio, ya que, en realidad, se trata de un conjunto de espacios y salas compartimentadas, formando todas ellas un único salón dividido por arcadas.