Suele explicarse que la estrecha relación entre Pedro Almodóvar y Antonio Banderas se resquebrajó cuando el actor malagueño se dejó cautivar por los cantos de sirena de Hollywood en 1992. El genio manchego le había propuesto actuar en 'Kika', en el que debía ser su sexto trabajo en común, pero Banderas prefirió partir rumbo a América para rodar 'Los reyes del mambo'. Almodóvar sintió que su actor fetiche, su mejor creación artística masculina, le había traicionado y, zaherido, pues el manchego es hombre de emociones intensas, necesitó largo tiempo para perdonarle.

Hicieron falta diez años para que volvieran a reunirse en 'La piel que habito' y ahora, con 'Dolor y gloria', han podido al fin cerrar el círculo de toda una vida: Almodóvar ha rendido cuentas con su pasado utilizando el rostro, el cuerpo y los gestos de Banderas, en una fascinante y arrebatada fusión entre vida y obra que la Academia del Cine Español recompensó, con toda justicia, con siete premios Goya, entre ellos mejor película, dirección, guion y, por supuesto, interpretación. Pedro es el director más importante de mi vida, el que mejor me ha entendido, afirmó un emocionado Banderas ya entrada la madrugada del domingo, horas después del final de la gala. Antonio, yo te seguiré llamando, le declaró Almodóvar con dulzura. Y yo seguiré viniendo. Y hay testigos, le contestó el actor, sonriente.

Antes, los discursos del cineasta y el actor sobre la tarima del pabellón José María Martín Carpena de Málaga ya habían sido estremecedores, en cuanto declaraciones rendidas de amor y agradecimiento mutuo. Banderas tenía un discurso escrito en una cuartilla (redactado durante la noche, entre tormenta y tormenta, mientras caían rayos y truenos) para agradecer el Goya al mejor actor, pero se le olvidaron las gafas de leer en el bolso de su pareja y acabó improvisando. Pedro, hace 40 años que nos conocemos. Hemos pasado por la movida, hemos hecho ocho películas, y nunca he conocido a un artista con la lealtad que tú le tienes a tu cine. He aprendido tanto de ti. No solo de arte, sino de la vida. Justo después, Almodóvar subía al estrado a recoger el Goya al mejor director. El discurso de Antonio me ha conmovido. Muchas gracias, Banderas, por tu maravilloso trabajo, respondió el manchego en el segundo de sus tres discursos de la velada, pura noche de gloria.

Finalizada la gala, con las pulsaciones algo más tranquilas, Banderas y Almodóvar comparecieron ante la prensa con las macizas estatuillas de los Goya aferradas entre las manos. Era mi quinta nominación y, en fin, no es que hubiera descartado ya este premio, pero era escéptico, aseguró el actor, cuyo éxito en los premios del cine español (como el de la propia película) puede ser un espaldarazo en sus opciones a los Oscar. Va a estar muy complicado. A ver si pago a Batman para que ser cargue al Joker, bromeó Banderas en alusión al personaje que interpreta Joaquin Phoenix, gran favorito para llevarse la estatuilla. En cualquier caso, es muy grande poder estar ahí. Yo ya solo voy a disfrutar.

Penélope y el Oscar

Penélope y el Oscar Recibiendo los premios me he sentido tan emocionado como si acabara de debutar, aseguró Almodóvar, consciente de la grandeza de la noche. Su obra más confesional, viaje ficcionado a recónditos espacios de su vida y obra, recibía los grandes trofeos de la Academia, esa entidad con la que siempre ha mantenido una extraña relación de encuentros y desencuentros. Reconozco que es la película que habla de un modo más directo de mi intimidad, pero nunca sentí que era como un director que hace su propio 'biopic'. Nunca tuve la sensación de que delante de mí estaba mi propia vida y de que Antonio era mi personaje. Siempre hay una distancia entre la realidad y la ficción, confesó el manchego, a quien, por cierto, se le escapó que Penélope Cruz entregará el Oscar a la mejor película internacional. 'Parásitos' está muy por delante de 'Dolor y gloria' en las quinielas, pero a nadie se le escapa que fue la propia diosa de Alcobendas quien cantó el histórico Pedrooo! cuando 'Todo sobre mi madre' ganó el Oscar hace ahora 20 años.