El tenor cordobés Pablo García-López está actuando desde ayer lunes, 27 de mayo, y hasta el 14 de junio, en nueve funciones de la ópera Capriccio, la última ópera del compositor Richard Strauss, en el Teatro Real de Madrid.

Capriccio, estrenada en Múnich en 1942 y surgida a partir de una idea original de Stefan Zweig, fue la última ópera que escribió Richard Strauss (1864-1949) y llega ahora a Madrid en coproducción con la Opernhaus de Zürich, con dirección musical de Asher Fisch y la dirección escénica de Christof Loy.

La ópera cuenta con un reparto internacional en los papeles principales con la soprano Malin Byström, el barítino Josef Wagner, el tenor Norman Reindhardt, el barítono André Schuen o el bajo Christof Fischesser, junto a los españoles Tomeu Bibiloni, Gerardo López o David Oller, todos ellos acompañados de la Orquesta Titular del Teatro Real.

Después de una temporada cargada de proyectos emocionantes como el Concierto X Aniversario del Centre de Valencia, dirigido por el maestro Plácido Domingo, o el estreno absoluto de la ópera FuenteOvejuna en el Teatro Campoamor de Oviedo, el tenor cordobés, uno de los referentes internacionales de su generación, está ya preparando la próxima temporada, que se desarrollará entre este año y el próximo.

Pablo García-López se encuentra muy ilusionado con diferentes proyectos musicales que le llevarán a cantar entre otras citas, a la Ópera de Lausanne, Teatro de la Zarzuela de Madrid, Londres o Berlín.