Sobresale en la cartelera (son tiempos en que predomina un cine de muy baja calidad artística) una muy interesante propuesta, La revolución silenciosa, producida en Alemania y basada en hechos reales que fueron los que inspiraron el libro de Diestrich Garstka y ahora la película de Lars Kraume (El caso Fritz Bauer, 2015). El relato se sitúa en el Berlín de 1956, justo cinco años antes de la construcción del Muro. Un grupo de alumnos alemanes (en Brandemburgo) decide guardar un minuto de silencio en clase en memoria de las víctimas de las revueltas de la Revolución Húngara celebradas ese mismo año contra el poder soviético. Las consecuencias que traerá dicha acción de protesta en una sociedad invadida por la represión compondrá el argumento de La revolución silenciosa.
Buen pulso narrativo y notables interpretaciones es lo que mantiene bien sustentada la base de esta cinta que, por otro lado, está correctamente ambientada y muy lograda la recreación de una época bastante gris.
Con un ritmo cadencioso, el espectador se mantiene interesado durante la totalidad del metraje en las vidas de estos personajes, narradas con el suficiente suspense como para no abandonar la trama mientras ellos se debaten entre seguir sus ideales o traicionarlos al estar en peligro su futuro.
Mantenerse firme a los principios no siempre es fácil y menos en esas condiciones, cuando peligra incluso la familia. Básicamente el filme se centra en varios espacios: el colegial, el familiar y el refugio donde se reúnen para escuchar en la radio las noticias que provienen de Occidente.
Siempre con unos protagonistas en la edad de la inocencia, cuando se encuentra el primer amor y la primera decepción. Todo ello sirve para introducirnos en una atmósfera oprimente como la que se vivía en esos tiempos en que las vidas de estos habitantes de la Alemania del Este estaban bajo el yugo del comunismo ruso. Aquí, el relato ha convertido lo que podría haber sido una sencilla anécdota en hecho histórico con el suficiente valor dramático como para enredarnos de principio a fin.
