Las reliquias de los Santos Mártires cordobeses fueron procesionadas ayer por el Patio de los Naranjos de la Mezquita- Catedral en un acto organizado por la hermandad de la Misericordia y enmarcado dentro del primer Congreso Internacional de Cultura Mozárabe.

La urna, venerada en la basílica de San Pedro, procesionó con gran solemnidad sobre una sencilla parihuela exornada con rosas rojas y portada por hermanos de la corporación del Miércoles Santo.

En lo que respecta al cortejo estuvo formado por representantes de distintas hermandades cordobesas, así como un nutrido número de hermanos de la Misericordia, además de la Agrupación de Cofradías, representada por su presidente, Francisco Gómez Sanmiguel. Cerraba el cortejo el obispo de la diócesis, Demetrio Fernández; Juan José Asenj,o arzobispo de Sevilla, y los seminaristas.

La prosesión claustral partió poco antes de las ocho de tarde del interior de la Catedral y recorrió el perímetro del Patio de los Naranjos entre un gran recogimiento y los acordes de la capilla musical de la Misericordia y un quinteto de viento de la banda de la Esperanza, que interpretaron principalmente motetes del Renacimiento.

La comitiva hizo su entrada en la Catedral por la Puerta de las Palmas, para dirigirse al altar mayor del templo. A continuación, dio comienzo el primer día del triduo con el rezo del lucernario en memoria de los Santos Mártires de Córdoba. El acto estuvo presidido por el arzobispo de Sevilla, Juan José Asenjo Pelegrina, y acompañado musicalmente por un grupo que interpretó música medieval bajo la dirección de Eduardo Paniagua.

Este acto de culto a los mártires cordobeses continuará esta tarde a las 20.00 horas en la Catedral con el segundo día del triduo, en esta ocasión presidido por el arzobispo de Granada, Francisco Javier Martínez.