La veterana poeta Francisca Aguirre (Alicante, 1930) ha sido la ganadora del Premio Nacional de las Letras Españolas. La autora, hija del pintor Lorenzo Aguirre, pertenecería por nacimiento a la Generación de los 50 con figuras como Jaime Gil de Biedma, José Angel Valente, Francisco Brines y Claudio Rodríguez, pero al tratarse de una autora más bien tardía, su reconocimiento solo se ha producido en los últimos años. La característica principal de la poesía de Aguirre es la de mostrar el mundo en el que vive, un intención que ella define como la intención de “dar noticia de mi historia”. A ello se unen unas ciertas preocupaciones existenciales más íntimas.

Entre los premios recibidos por la poeta están el Leopoldo Panero (recibido por su poemario Ítaca, 1971), Premio Ciudad de Irún (‘Los trescientos escalones, 1976) , Premio de la crítica valenciana al conjunto de su obra (2001), Premio Internacional Miguel Hernández (‘Historia de una anatomía’, 2010) y el Premio Nacional de Poesía (2011). También ha cultivado la prosa en el libro de memorias ‘Espejito, espejito’ y en los relatos ‘Que planche Rosa Luxemburgo (Premio Galiana, 1994).

El premio que condece el Ministerio de Cultura está dotado con 40.000 euros.