La exposición Mujer y Paisaje del artista cordobés Pepe Cañete, que se inaugura en el Palacio de la Merced mañana jueves, recoge en 54 obras la "simbiosis" que ve el autor entre la figura femenina y los paisajes. Cañete señaló ayer en conferencia de prensa que las obras que componen la muestra abarcan un período de creación entre 1997 y 2005 y "a medida que cambia mi concepción de la figura de la mujer va cambiando también el paisaje".

La muestra es, según el artista baenense, "un homenaje a la mujer contemporánea con usos normales, que monta en bici, que hace la compra, que trabaja fuera de casa", algo "tan simplista pero que nunca ha sido recogido por la historia del arte".

El delegado de Cultura en la Diputación de Córdoba, Serafín Pedraza, resaltó las dotes de Pepe Cañete tanto en el diseño de cartelería como en la ilustración y recordó que la primera exposición individual del artista tuvo lugar en 1980 en el mismo Palacio de la Merced.

Pedraza indicó que "estamos ante la última etapa artística de este autor, consolidada, sin duda, donde fondo y forma son de una gran solidez, y en la que cobra protagonismo la figura femenina".

TECNICA PICTORICA En cuanto a la técnica utilizada, el artista mezcla libremente óleo, acuarela y tinta china y enriquece la tabla o el lienzo con la arena, una materia en sus composiciones donde el pintor esgrafía la silueta femenina para después fundirla con la naturaleza mediante las manchas de color.

Pepe Cañete ha explicado a este periódico que desde el punto de vista técnico, la arena es el compuesto esencial de esta serie, ya que organiza innumerables texturas, dependiendo de su forma, tamaño, porosidad, limpieza o dureza.

Esta es la sexta exposición individual del pintor baenense desde el año 1980, aunque ha participado además en más de 20 muestras colectivas. Cañete ha realizado siete carteles de distinta temática y ha pintado innumerables portadas de revistas o libros.

La actual muestra, que se inaugurará mañana (21.00 horas) y permanecerá abierta hasta el 30 de junio, se estructura de manera temática en figuras individuales (las realizadas entre 1997 y 1999), colectivas (2000-2002) y las pinturas que recogen secuencias temporales de acciones cotidianas (2003-2005). En este último periodo creativo resaltan las figuras en primer plano, siguiendo un esquema de movimiento y pose.