La Mezquita-Catedral de Córdoba ha abierto la noche de este domingo sus puertas para acoger el primer concierto desde el confinamiento y lo ha hecho con un aforo reducido para que este espacio sea escenario de un sentido homenaje musical a las víctimas de la pandemia del covid-19.

El 11º Festival Internacional de Piano Guadalquivir ha presentado su tercer recital, titulado Luz, de la mano de Pasión Vega en una versión inédita en la que ha prestado su voz para entonar versos poéticos que entonó de la mano de Antonello D’Onofrio, al piano, y Valeria Marsheva, con la flauta travesera.

Las medidas de seguridad que exige la actual situación sanitaria ha convertido a los escasos asistentes, separados por la distancia de seguridad establecida, en unos privilegiados, que han tenido la oportunidad de escuchar a la cantante recitando textos de G. Leopardi, Saffo, P. Verlaine y Pirandello acompañados por la música de Beethoven, Schumann, Brahms, Debussy y Rachmaninov. Desde mucho antes, todas las entradas estaban agotadas, según fuentes de la organización.

Con este concierto, la Mezquita-Catedral se consolida, tras cinco años de colaboración, como escenario incomparable del Festival de Piano, que arrancó el pasado 4 de septiembre, superando el obstáculo del covid-19 y se prolongará hasta el próximo día 26. Hasta ahora, los tres conciertos celebrados han registrado lleno completo.