La Orquesta de Córdoba ya tiene director titular para las dos próximas temporadas: Lorenzo Ramos. Y lo tiene tras un largo y riguroso proceso de libre concurrencia, al que se presentaron 68 candidatos, alabado por todos los participantes en la elección. De ellos se seleccionaron 5 y ayer, finalmente, la junta general del Consorcio Orquesta de Córdoba, a propuesta del Consejo de Administración, eligió a Ramos por unanimidad.

Luis Miguel Jiménez, presidente del Consejo de Administración en representación de la Junta, señalaba a la salida de la reunión que los cinco proyectos finalistas "son absolutamente solventes" y mostraba su satisfacción por el trabajo realizado y el cumplimiento de los objetivos trazados. Sobre el proyecto ganador, dijo que es "un proyecto de integración con la ciudad y su entorno que tiene muy en cuenta el momento económico que estamos pasando sin menoscabo de la imaginación artística; un proyecto muy pensado, muy meditado y muy ponderado con plenas garantías".

La decisión se ha adoptado tomando como punto de partida el informe presentado por la comisión técnico-artística designada por el Consejo de Administración para encargarse del proceso de selección de los candidatos, según nota informativa enviada a este periódico.

El proceso seguido para el nombramiento ha contado con el apoyo explícito del comité de empresa, la Comisión Artística de la Orquesta y del CSIF, representación sindical mayoritaria de sus trabajadores, quienes han mostrado su satisfacción por la transparencia de un procedimiento que ha garantizado la igualdad de oportunidades entre todos los aspirantes. El trabajo de la Comisión ha consistido en intentar encontrar un candidato que se adaptara al perfil considerado idóneo para la Orquesta de Córdoba: "máxima disponibilidad, contrastado nivel artístico y experiencia orquestal. También se buscaba implicación y motivación, rigor artístico de las propuestas e interés por incorporarse al proyecto de nuestra Orquesta", señala la nota.

Tras realizar las entrevistas, la Comisión eligió a Lorenzo Ramos por "la solvencia de su proyecto artístico (ambicioso pero razonable, a la vez que novedoso y atractivo), una sólida formación académica, su contrastada experiencia profesional, su conocimiento de la vida musical cordobesa, su gran dosis de entusiasmo por asumir esta tarea y el compromiso de involucrarse en la vida de la ciudad (no sólo a nivel artístico, sino intentando hacer de la orquesta una herramienta de integración social), reflejado en su intención de trasladar su residencia a Córdoba desde el momento de su incorporación a la Orquesta".

En la elección ha sido determinante el hecho de ser el director mejor valorado por los componentes de la Orquesta.