Lola Herrera dirá adiós en Córdoba a Carmen Sotillo, la protagonista de Cinco horas con Mario, de Miguel Delibes, y el personaje más importante de su carrera. Lo interpretó por primera vez hace casi 40 años, en 1979, entonces, como ahora, bajo la dirección de la cordobesa Josefina Molina. El montaje inicia hoy en el Teatro Góngora esta gira de despedida, que recorrerá toda la geografía española. De este espectáculo se ofrecerá una función diaria hasta el sábado 14.

El texto de Miguel Delibes comienza en marzo de 1966. Carmen Sotillo acaba de perder a su marido, Mario, de forma inesperada. Una vez que las visitas y la familia se han retirado, ella sola vela durante la última noche el cadáver de su marido e inicia con él un monólogo-diálogo en el que se descubren sus personalidades y los conflictos de su matrimonio.

La obra es, entre otras muchas cosas, un documento vivo de esos años sesenta. De las preocupaciones económicas, religiosas, políticas, sexuales y morales entonces imperantes que Delibes, a través del lenguaje de su protagonista, dejó retratadas con nitidez, de forma que la vida española de entonces llega a palpitar viva en sus palabras. Pero, por encima de todo esto, Cinco horas con Mario habla de los asuntos eternos del ser humano: de la culpa, de la soledad, de la incomunicación y del sentido de la vida. Como siempre en Delibes, partiendo de un localismo concreto, encarna en sus personajes y en sus conflictos las realidades más profundas y complejas que condicionan nuestra vida.