El 2019 viene cargado de promesas, esos libros por los que merece lanzarse en barrena hacia la librería más cercana. Y es que en los capítulos internacional y local los últimos trabajos de las grandes figuras de las letras se muestran de lo más apetecible, aunque no haya en esa lista un potencial superventas que a buen seguro los sellos reservan para más adelante. La voz de las mujeres se oyó muy fuerte el pasado año y este, por lo apreciado, prosigue por esa senda. También nos acompañarán esos ensayos que nos ayudan a orientarnos en estos tiempos tan confusos.

Abre el fuego de la temporada Serotonina (Anagrama), la sustancia que permite al autor francés más amado y despreciado, Michel Houllebecq, levantarse cada mañana no con buena cara, que eso es imposible, pero sí con los suficientes ánimos como para ponerse a escribir. También es el título de su última y muy esperada novela (el día 9 en librerías), que transita por sus habituales obsesiones: la crítica consumista, el erotismo y el desprecio a la moral burguesa. Otro autor esperado, esta vez por partida doble, es Murakami, que nos dejó con ganas de más cuando el pasado noviembre se publicó la primera parte de La muerte del comendador (Tusquets / Empúries). Y, con honores de estreno, Qui et penses que ets? (Club Editor), un volumen de relatos entralazados de la Nobel Alice Munro de 1978, que no se había publicado en castellano.

LOS VALORES SEGUROS // Hace siete años, cuando parecía que Julian Barnes había dado sus mejores obras, se descolgó con su soberbia El sentido de un final; ahora repite con la misma brevedad e intenciones gracias a La única historia (Anagrama). Y en el mismo catálogo, Días temibles de la inmisericorde A. M. Homes, que en estos relatos despliega su habitual dosis de mala baba. También habrá que echarle un ojo a El amor es ciego del británico William Boyd (Alfaguara), elegante melodrama de pasión y venganza, marcado por el más absoluto placer de narrar. Algo parecido a lo que la norteamericana Anne Tyler -esta vez con El baile del reloj (Lumen / Proa)- y el británico David Lodge (Un hombre con atributos, Impedimenta) nos tienen acostumbrados. Sin olvidar a dos pesos pesados como Jonathan Lethem (Anatomía de un jugador) y Dave Eggers (El monje de Moka), ambos en Random House.

En Seix Barral apuestan fuerte por El día que Selma soñó con un okapi, de Mariana Leki, todo un best-seller en Alemania que recuerda en cierta manera a La elegancia del erizo de Muriel Barbery. En Destino lo hacen por el cambio de tercio de Félix J. Palma, que ha abandonado sus ficciones victorianas por una novela negra contemporánea habitada por un asesino en serie que mira al pasado en El abrazo del monstruo. Y en Plaza & Janés ofertan El zorro, último trabajo del veterano Frederick Chacal Forsyth. Sin olvidar la resurrección de Pepe Carvalho, Problemas de identidad (Planeta / Columna), en la que se ha embarcado Carlos Zanón. La pregunta es ¿qué pensaría Manuel Vázquez Montalbán?

Aunque ahora el género parece impregnar toda la literatura, los amantes del noir estricto están de enhorabuena con las nuevas entregas de Bernard Minier, Una maldita historia, y Louise Penny, Un destello de luz, ambas en Salamandra, y Claudia Piñero, Elena sabe (Alfaguara). Y un autor indiscutible, Michael Connelly, que en Las dos caras de la verdad hará que su héroe Harry Bosch intente limpiar su nombre, que ha quedado en entredicho. Y como fin de fiesta, un nuevo Benjamin Black (la cara B del gran John Banville) que en Los lobos de Praga sirve a la vez una novela histórica y una intriga criminal en el siglo XVI.

Ray Loriga, el autor de Héroes, estará en las novedades por partida doble. Por derecho propio, con su nueva novela Sábado, domingo (Alfaguara) y como personaje de Daniel Jiménez en Las dos muertes de Ray Loriga (Galaxia Gutenberg), en un extraño experimento que une «novela negra, autoficción y biografía no autorizada». En marzo, la ex del escritor y madre de sus hijos, Christina Rosenvinge, se estrena como autora literaria con Debút. Diarios y canciones, donde repasa medio siglo de trayectoria musical. Elvira Navarro regresa a la ficción-ficción con La isla de los conejos (Random House), 11 cuentos de corte fantástico, género en el que tantas autoras están brillando últimamente. Edurne Portela publicará otra novela, Formas de estar lejos (Galaxia Gutenberg), tras su celebrado debut con Mejor la ausencia. Y ojo a una debutante, la periodista venezolana afincada en España Karina Sainz Borgo, que ha conseguido vender su primera novela, La hija de la española (Lumen), a 21 países antes de su publicación (marzo), en un caso similar al de Milena Busquets y su También esto pasará. Junto a ellas están Petit París de Justo Navarro (Anagrama) y El aliado de Iván Repila (Seix Barral).