Este sábado habría concluido la edición más redonda del Festival de la Guitarra de Córdoba, que cumplía su 40 edición con días llenos de actuaciones, clases magistrales o conferencias y, aunque la pandemia obligó a su cancelación, ya se prepara para que el próximo año vuelva a vibrar con fuerza.

Se trata de un Festival cada vez más conocido en el mundo que hasta mantiene contactos con otros certámenes similares, como el de Adelaide, en Australia, pero la pandemia y el confinamiento han dado al traste con el trabajo para esta edición tan especial.

La concejala de Cultura del Ayuntamiento de Córdoba, Blanca Torrent, ha reconocido a Efe que la decisión de cancelar el evento ha sido "muy dura por no poder celebrar algo tan emblemático para la ciudad y con un aniversario tan llamativo".

Aunque algunas críticas apuntan que se podía haber celebrado algo alternativo a modo de guiño con algún artista especial, Torrent reconoce que "no hubiera dado tiempo en junio a organizar ni preparar nada", mientras que la contratación ahora mismo de grupos, y más de carácter internacional, "está casi imposible".

Hay que tener en cuenta que un festival de estas características, con un presupuesto de 1.275.000 euros como era el de este año, "tiene el trabajo de un año y era totalmente inviable, porque hay una pata fortísima del certamen, que es la presencia internacional".

Desde el pasado mes de abril ya se estaba barruntando que era inviable su celebración y "veíamos que se nos caía", porque los artistas "no iban a venir y la parte formativa del certamen hubiera sido totalmente imposible".

"Había entonces muy pocas giras a nivel internacional y nos estaba costando muchísimo trabajo captar algo de nivel para lo que queríamos que era el 40 aniversario", ha asegurado.

Eso sí, la imagen del 40 aniversario estaba ya preparada y a punto de ser presentada públicamente en marzo para dar los primeros coletazos, y a los "dos días todo se vino abajo", ha indicado Torrent.

"Es un espectáculo que se merece sus aforos completos, pero un 40 aniversario con un pequeño formato no lo veía ni tenía cabida", ha insistido la responsable municipal cordobesa.

Con ella ha coincidido por completo Carlos Espinosa, de Riff Producciones, la firma cordobesa dedicada a promoción y contratación, entre otros servicios, de artistas vinculados a la música que más espectáculos mueve en la provincia.

"No había nada cerrado por parte de nadie, no teníamos ni el IMAE (Instituto Municipal de Artes Escénicas) ni nosotros nada confirmado", entre otras cuestiones por la situación internacional que no daba "garantías para viajar", mientras que unas producciones como las que se ven en el Festival de la Guitarra "no se ponen en marcha para aforos reducidos".

El Ayuntamiento dice que se va a "echar el resto" para el próximo año

Según Espinosa se estaba en conversaciones con el grupo granadino 091, que precisamente el pasado jueves tocó en La Axerquía, pero no hay mucho más, "porque nadie quiere arriesgarse a contagiar o a ser contagiado o que le pase algo a alguno de los miembros del equipo que salen mover los artistas".

De esta manera, el objetivo será "redoblar esfuerzos para la próxima edición, porque lo que ha pasado ahora no es culpa de nadie, pero nos está afectando a todos".

Es más el productor musical ha dejado claro que conciertos como el de 091 o el de Amaral el próximo 1 de agosto, "no son la solución para nuestros problemas en absoluto, ni son válidos para la industria cultural, porque ver un concierto sentado y con mucho menos público del habitual no logra que haya interacción y comunión entre artista y público".

Torrent ha avanzado que se va a "echar el resto" para el próximo año, que espera que "se pueda celebrar" y no será la edición 41, sino "la 40 + 1", que no es lo mismo, porque "Córdoba no se va a quedar sin esa celebración".

La concejal ya está con su equipo dándole vueltas a la cabeza para un certamen "muy, muy especial", que tocará todos los palos musicales, "pero hasta ahí puedo leer, porque ahora mismo estamos evaluando y trabajando y es muy pronto para decir qué va a venir el próximo año", en el que la guitarra volverá a vibrar en Córdoba.