Los cines El Tablero ofrecen mañana jueves a las 20.00 horas un pase especial de la película del cordobés Guillermo Rojas Una vez más, una comedia dramática protagonizada por Silvia Acosta y Jacinto Bobo y que propone un reencuentro con el pasado y los sueños de juventud. En el estreno, al que asistirá el propio director, habrá una presentación y un coloquio con el público tras la proyección de la película.

Puede comprar las entradas aquí

Rojas dice sentirse especialmente ilusionado de poder estrenar “en este año tan loco”. “Estamos muy contentos, teníamos pensado estrenar a finales de mayo, pero lo retrasamos por estar en pleno confinamiento. Hemos estado buscando la mejor fecha posible para una película de nuestras características”, explica. Tras recibir varios premios Tras recibir varios premiosy haber pasado por varios festivales, han decidido que este es el momento ideal para que se pueda disfrutar en la gran pantalla unas semanas antes del estreno en plataformas. “Para mí es importante que mi primera película como director se pueda ver en cines. Siempre he sido un gran defensor de las salas y me gustaría apoyar al sector y no saltarme este paso en la distribución. Sé que es posible, que vaya menos gente que en un momento normal, pero quiero hacerlo así”, aclara el director.

En cada ciudad donde se va a estrenar la película han decidido acudir para hacer encuentros con el público, ofreciendo “un plus” para que la gente vaya. Son conscientes de “la saturación que hay en el calendario de estrenos por el retraso que ha provocado la pandemia” pero quieren intentarlo.

Con respecto a Córdoba, Rojas comenta que siempre intenta estrenar en Córdoba sus trabajos y su primera película de ficción, tras una década haciendo documentales, no podía ser menos. En principio, en la ciudad solo se proyectará mañana -estando a la espera de lo que ocurra para ver si se mantiene en cartelera unos días más--. “Somos una producción modesta y no sentimos la presión de tener que hacer taquilla. Todo lo que venga va a ser un regalo y lo vamos a disfrutar”, afirma.

El proyecto, que mantuvo al director en vilo durante cinco o seis años, siempre se concibió como algo sencillo y asumible desde su productora para “tener todo el control creativo” --Rojas escribe, dirige, monta, produce--, y ha supuesto un gran reto para todo el equipo. Se rodó en mayo entre Sevilla y Londres y el proceso de grabación fue complejo, pero “muy gratificante”. “Somos un equipo pequeño, casi familia, gente con la que hemos trabajado la película durante mucho tiempo. No solo ha sido mi primera vez como director de ficción; ha sido también la primera vez de muchos de los que me han acompañado. Se creó una sinergia muy guay y, sin duda, ha supuesto una experiencia única que se ha traducido en el resultado”, concluye.