LUGAR Y FECHA DE NACIMIENTO SANTA CRUZ DE TENERIFE, 1947.

TRAYECTORIA LICENCIADO EN PERIODISMO, HA ESCRITO UNA VEINTENA DE LIBROS Y TIENE EN SU HABER PREMIOS COMO EL PLANETA, EL PEREZ GALDOS O EL ONDAS. ACABA DE PUBLICAR LA NOVELA 'TAMBIEN LA VERDAD SE INVENTA'.

La radio y la noche son los escenarios de la nueva novela de Fernando Delgado, También la verdad se inventa , que ayer presentó en la Feria del Libro de Córdoba. Con humor, drama e intriga, sitúa la acción en un programa radiofónico que cada noche acoge los testimonios de una colección de oyentes que confían a la periodista conductora sus complejos y obsesiones. Este es el argumento del que Delgado se vale para defender la libertad de inventarse a uno mismo.

-- También la verdad se inventa es un sugerente título que se presta a interpretaciones. ¿Qué quiere usted contar?

--Es tan sugerente como todo lo que hacía Antonio Machado, especialmente en el terreno del pensamiento. También La verdad se inventa porque algunos personajes de la novela, que hablan en un programa de radio, pueden llegar a dar la impresión en algún momento de que se embalan y mienten. Pero no mienten, cuentan su otra verdad, la que pertenece al mundo de su propio imaginario, a esos otros personajes que los habitan. Una cosa es mentir, que es algo destructor, y otra son las otras verdades.

--¿Por qué elige la radio como escenario de esta novela, convirtiéndola en un personaje más?

--La radio es parte de mi vida y necesitaba un espacio público para la confesión de mis personajes. La radio y la noche unidas me parecían un buen procedimiento. Después, casi al final de la novela, me di cuenta de que la radio era un personaje.

--¿Por qué no internet, que es más moderno y el gran cajón de la gente que se refugia en el anonimato?

--Creo que la radio es más anónima que internet. Se dice que la radio es la precursora de las redes sociales. Sin embargo, hoy es el medio que, estando en las redes sociales y formando parte de internet como todo, sigue siendo insustituible y autónoma. No requiere de una pantalla para ser oída.

--¿Por qué aborda a estas alturas el tema de la identidad sexual? ¿Sigue siendo un asunto con el que cuesta ser sincero?

--Sigue habiendo reticencias a las libertades sexuales y nos cuesta ser sinceros, aunque hayamos dado pasos importantes en este sentido. Pero yo he querido abordar el tema de la identidad en general y creo que la sexualidad nos explica. Por tanto, me parecía conveniente tratar el tema.

--¿Todos escondemos a otro yo? ¿Es insatisfacción?

--Creo que sí. Escondemos a otro yo y muchas insatisfacciones.

--La novela defiende el derecho a vivir nuestro propio imaginario. ¿Cuáles son los riesgos de inventar una realidad paralela?

--El único riesgo que se corre es el de entendernos mejor. A veces no nos conocemos porque no reconocemos a los otros que nos habitan.

--¿Es el de su novela el programa de radio que le hubiera gustado hacer?

--No. Tengo poca paciencia para ser confesor.

--En el tiempo de la imagen, de la apariencia, ¿es la radio el medio más reflexivo?

--Sí. Y también el medio menos exhibicionista.

--Como periodista, ¿como ve la situación de la profesión y de los medios de comunicación?

--Vivimos una democracia agónica y la información sin democracia vive con dificultades serias. Los poderes manejan medios de comunicación, no solo los políticos sino también los económicos, por tanto, a veces los periodistas podemos llegar a ser meros muñecos de guiñol que interpretamos la realidad, unos con honestidad y otros con intereses particulares. La objetividad no existe, pero la honestidad, sí.