El escritor cordobés Manuel Gahete ha sido recientemente reelegido presidente de la Asociación de Escritores de Andalucía, y tanto él como su nueva junta directiva se han impuesto una serie de retos, de los que el también poeta habla con entusiasmo.

-Lleva al frente de la Asociación de Escritores Andaluces desde el 2014 y acaba de ser reelegido. ¿Cuál es el objetivo de este colectivo?

-Fundamentalmente, reinvidicar los derechos de los escritores andaluces y su literatura, atendiendo a sus necesidades, organizando congresos y jornadas o participando en las ferias del libro. En definitiva, defender y difundir la literatura andaluza.

-Entre sus retos figura un acercamiento a las instituciones y a la sociedad en general. ¿Buscan más visibilidad?

-Exactamente. Eso es algo que nos propusimos todo el equipo directivo, ampliar las expectativas, visualizar. Hemos conseguido entrar en la Universidad, pero queremos acercarnos a los ayuntamientos, a las diputaciones y a otros colectivos de escritores y de editores.

-¿Qué puede hacer este colectivo por la sociedad?

-Dar voz a los callados es una misión de los escritores. Somos responsables de detectar las posibles injusticias que ocurren en la sociedad y ponerlas en evidencia. Yo soy partidario, como decía Celaya, de que el escritor tiene que ser una persona comprometida y, a parte de las piruetas verbales, es necesario decir lo que está ocurriendo en este mundo.

-También pretenden introducir a las nuevas generaciones de escritores. ¿Están muy alejados de ellas?

-No. El problema es que no se les escucha suficientemente. Falta diálogo, hay que ir a las generaciones más jóvenes y preguntarles qué es lo que quieren, cuáles son sus aspiraciones. Y en ese contexto dialogante pretendemos empezar a trabajar.

-¿Qué otros objetivos se han impuesto?

-Por ejemplo, extendernos hacia el norte de África. Prácticamente, somos hermanos y hay un colectivo muy numeroso de escritores que tiene el español como lengua literaria. Ya hay cinco autores marroquíes que pertenecen a nuestra asociación. Y también queremos promocionarlos.

-¿Tendrá más peso la mujer en este nuevo mandato?

-Sí. Han ingresado muchas mujeres y hemos incorporado a personas mucho más jóvenes. De hecho, la nueva delegada de Málaga, Aurora Gámez, es una feminista a ultranza. Desde que comenzamos nuestra nueva candidatura ya ha propuesto muchas actividades en las que la mujer es protagonista.

-¿Cómo valora a Córdoba dentro de la literatura andaluza? ¿Algún proyecto especial para esta ciudad?

-Queremos incentivar la poesía entre los jóvenes y acercarnos a institutos y colegios, organizar jornadas y publicaciones para que se vaya visualizando la poesía joven cordobesa. En el panorama andaluz, Córdoba es una de las principales capitales, literariamente hablando.

-¿Qué balance hace de su anterior mandato? ¿Cuáles fueron los mejores y peores momentos?

-Los momentos más felices han sido las entregas de nuestros premios. Los más tristes fueron las despedidas, la muerte de autores como Pablo García Baena, Pepe de Miguel, Pilar Pasamar, Antonio Garrido Moraga, Pilar Quirosa y Julio Alfredo Egea.

-Como poeta, ¿qué le parece el festival Cosmopoética y el cartel anunciado para su próxima edición?

-Cospoética es algo muy positivo para la poesía de Córdoba y es algo que no se puede perder. Hay años más equilbrados que otros, y en esta ocasión no me parece muy distinto a los demás, pero lo importante es que reúne de una forma clara, no solo a los poetas, sino a toda Córdoba.