El Centro de Creación Contemporánea de Andalucía (C3A) se enfrenta a un intenso otoño lleno de actividades, en las que se pondrán en marcha los programas que definirán su futuro y marcarán el trabajo de los próximos años, tanto en el terreno expositivo como en el de la educación, formación y las residencias artísticas. Tras la exposición dedicada al artista contemporáneo cordobés Pepe Espaliú, que se cierra el próximo domingo con un balance «positivo» aun sin cifras concretas de visitantes, en el terreno expositivo se podrá disfrutar, a partir del 20 de septiembre, de la muestra Constelaciones, que se ha realizado en colaboración con el Musac de León y detalla el desarrollo de la poesía visual y experimental en España desde el año 1963 hasta la actualidad.

«Es una exposición que reúne a más de un centenar de poetas, escritores y artistas, y es la primera muestra que en España ha abordado esta temática de manera profunda», asegura Álvaro Rodríguez Fominaya, director del centro, que anuncia que se podrá ver hasta el 7 de enero, conviviendo así con la que actualmente acoge el C3A en torno al proyecto que Isidro Valcárcel realizó en Córdoba entre el 27 y 30 de noviembre de 1974, y que constituye un análisis del centro de la ciudad a partir de lo que el autor llamó arte sociológico.

RESIDENCIAS ARTÍSTICAS \ Por otro lado, el C3A acogerá las primeras residencias artísticas a cargo de los creadores Ainara Rodado, Pedro Soler, Laura Morales y el colectivo Culturhaza, que trabajarán en el centro durante octubre y noviembre en el marco de un simposio en torno a la agricultura y el arte contemporáneo que estará dirigido por La Fragua, aunque «todavía no estamos dentro del modelo de becas residencia que se pretende llevar a cabo, que aún está en fase de desarrollo jurídico y se lanzará a final de año o para el próximo», explica Rodríguez Fominaya. El programa de residencias es una de las señas de identidad del C3A, y es por eso que «queríamos que este otoño hubiera artistas o colectivos trabajando en el centro», continúa el director, que reconoce que el balance de su trabajo hasta ahora en el centro, del que se hizo cargo el pasado mes de marzo, «ha sido muy productivo», aunque, explica, «estamos trabajando con la idea del medio y el largo plazo, y este otoño es cuando realmente vamos a ver el concepto del C3A por el que estamos apostando», donde tendrán cabida el debate, los programas públicos, las residencias de artistas y los proyectos creados expresamente para el edificio. «Estamos adquiriendo más velocidad», pero «tenemos que tener en cuenta la complejidad que acarrea lanzar un proyecto de esta envergadura, en el que, al mismo tiempo, estamos poniendo en marcha aspectos logísticos de la institución, por eso siempre hablo del medio o largo plazo con la pretensión de que el centro tenga un impacto en su contexto».

Otra de las cuestiones «fundamentales» por las que se apostará es la celebración de talleres impartidos por artistas, y ya hay tres programados. Se trata de los que llevarán a cabo Thomas Köner, Du Yun -una compositora nortemericana que ha recibido recientemente el premio Pulitzer de música y es una de las pocas mujeres que ha obtenido este reconocimiento- y Pilar Albarracín. «Todos estos talleres tendrán en común la idea de distintos tipos de desarrollo en torno a la performance ligada al arte sonoro», aclara Fominaya. En el terreno educativo, otro de los pilares del centro, se ha creado un programa que pondrá en conexión a los colegios con el C3A, y que no consistirá «simplemente en una visita, sino que estamos desarrollando contenidos para que los profesores puedan trabajar en clase, una metodología contrastada con la que trabajan muchos centros de arte de todo el mundo», concluye Rodríguez Fominaya.