Aunque pueda resultar paradójico, la actividad en la Red Municipal de Bibliotecas es ahora casi tan activa como antes del coronavirus. «La salvedad es que no vemos a los usuarios y la mayoría de actividades se están desarrollando de manera virtual», explica Rafael Ruiz, director de esta red que se ha puesto al día, dentro de sus medios y con mucha imaginación, de lo que los usuarios confinados en sus casas le demandan.

Lo primero que hicieron en la Biblioteca Central fue pensar qué servicios ofrecidos habitualmente podían seguir prestándose pero adaptándolos a internet. De este modo algunos de los clubs de lectura se han empezado a celebrar en videoconferencia (otros ya se hacían telemáticamente desde hace unos meses) y se está adaptando a un formato de audio el ciclo de Conversaciones en La Central, por el que han pasado personas de la talla de Muñoz Machado o Jesús Maraña entre otros, y La hora del cuento, que los niños pueden ver ahora en vídeo. Asimismo, se ha lanzado La lectura en casa con lecturas digitales de Odilo School, que están organizadas por edades (especialmente dirigidas a niños de entre 4 y 16 años) y pueden leerse en distintos idiomas.

Además, al principio del estado de alarma intuyeron que los cordobeses querían tener acceso a lecturas relacionadas con epidemias y virus, y así lo dispusieron en su web: «Los primeros días del confinamiento fue un fenómeno de ventas La peste de Camus y se dispararon las lecturas de ese tipo», comenta el director.

Pero la Red Municipal de Bibliotecas no se quedó ahí, sino que fue más allá y ha creado nuevos productos para los nuevos tiempos. En este apartado destaca un homenaje a Gianni Rodari (1920-1980) ideado por Pilar Nicolás, que consiste en la grabación de audiorrelatos de sus Cuentos por teléfono con la participación desde sus casas de los lectores que lo deseen. En esta misma línea se están ofreciendo audiograbaciones de relatos de Emilia Pardo Bazán, que están teniendo mucho éxito, y que seguirán la semana próxima con fragmentos del Quijote. Para esta actividad, la Biblioteca ha contado con la colaboración del profesor y director de La Barraca 21 Bernardo Ríos.

La lectura digital se complementa con el programa eBiblio Andalucía, un servicio conjunto de las bibliotecas andaluzas para el préstamo de libros electrónicos a quienes dispongan de tarjeta de usuario (dicha tarjeta se continúa expidiendo de forma gratuita a través de la dirección de correo electrónico lectores@cordoba.es). Por último, hicieron una selección de todos estos servicios virtuales relacionados con la lectura y el ocio alternativo y los han expuesto en su web de forma sencilla y accesible. «Lo bueno de esta crisis ha sido que personas que hasta ahora eran reticentes a lo digital empiezan a ver que tiene también sus ventajas, ya que son recursos gratis y accesibles sin tener que desplazarse, y que abren un campo muy amplio».

Ruiz está convencido de que todo esto va a ser una revolución y está por ver qué pasará con la lectura. «Antes de la crisis, la venta de libros electrónicos se había estancado y se había disparado el audio libro», comenta y afirma que no cree que esta situación marque el fin del papel porque la mayoría de los lectores sigue prefiriendo ese formato. «Se trata de experiencias distintas», asegura.