Los baños árabes de San Pedro contarán con un centro de interpretación y estarán abiertos en un plazo de dos años si no surgen contratiempos que alarguen la intervención que realizará la Consejería de Cultura de la Junta. La delegada territorial de Cultura, Cristina Casanueva, junto con el arqueólogo de la Junta, Alejandro Ibáñez, han visitado los restos de estos baños que se conservan dentro de dos inmuebles de la calle Carlos Rubio. Su peculiaridad es que estos baños están emplazados "fuera de la Medina, algo inusual que los hace muy especiales", ha manifestado la delegada.

Cultura ha licitado ya la redacción del proyecto, su musealización, el estudio de seguridad y salud, la dirección facultativa de la obra, la coordinación de seguridad de la misma y la intervención arqueológica por un presupuesto de 146.948 euros. El plazo establecido es de un mes para la elaboración de la memoria justificativa y de tres para la redacción del proyecto básico y de ejecución. Tras ello se licitarán las obras, que se ejecutarán en un periodo de trece meses, plazo en el que se incluye la musealización. Aunque será el proyecto el que determinará el presupuesto total, la cifra que se baraja es de 700.000 u 800.000 euros. El 26 de octubre acaba el plazo para la presentación de ofertas. Este es el primer paso para consolidar, restaurar y rehabilitar este monumento.

Los baños árabes de San Pedro fueron declarados Bien de Interés Cultural en 1931 y se encontraban dentro de un taller de platería. Esta construcción pertenece a la época "de esplendor del califato", según lo explicado por la delegada territorial de Cultura. La Junta adquirió hace años los inmuebles número 8 y 10 de la calle Carlos Rubio, que tienen una superficie de 475 metros cuadrados. En uno de ellos, el número 10, de 240 metros cuadrados, se conservan la caldera que aportaba temperatura al agua, varias cubiertas abovedadas de diversas salas anexas y estructuras emergentes de varias viviendas que se han ido transformando desde época del califato. En el otro, que es donde menos restos se conservan, es donde irá el centro de interpretación.

Alejandro Ibáñez ha subrayado la importancia de este baño público, de "época medieval califal" y de "ascendencia romana, que conserva los mismos elementos, sala fría, caliente y templada" y que pudo tener su entrada por la plaza de la Paja. Los baños, además de ser un espacio de higiene, eran un lugar para socializar. Estos baños, desde su construcción, han tenido muchas reparaciones y han sido víctimas de expolio. Algunas de las piezas que se han recuperado se conservan en el Museo Arqueológico. La Junta cree que cuando empiece la intervención arqueológica pueden aflorar más vestigios del pasado.

La Junta ya ha realizado distintas intervenciones en los dos solares desde su adquisición liberando el peso que tenían los restos al estar cubiertos por el taller de platería; limpiando; consolidando; eliminando humedad; y colocando una reja para evitar el daño de las palomas. Desde la visita de este verano de la consejera de Cultura, Patricia del Pozo, la Junta ha invertido 20.000 euros en limpieza, mantenimiento, trabajos geotécnicos y en un levantamiento fotogramétrico.

Localización de los baños árabes de San Pedro en Córdoba.