El «faro» de la literatura iberoamericana que durante décadas iluminó la cultura en español «se ha apagado», según reconocieron ayer escritores de varios países latinoamericanos que participan en la Semana Negra de Gijón, informa Efe.

El llamado «boom latinoamericano» que entre los años 60 y 90 del pasado siglo fue un referente de la cultura «ya no existe» y Buenos Aires, México y La Habana han perdido el papel protagonista en la creación, distribución y comercialización de libros. Así lo consideran el mexicano Fritz Glockner, el argentino Enzo Maqueira, el cubano William Navarrete y el peruano Jorge Eduardo Benavides, que participaron ayer como invitados en el festival.

La pérdida de prestigio del compromiso político en las artes frente al auge de una nueva ideología que predicaba el fin de las ideologías en los años 90 y las fronteras en el «monopolio» editorial le han dado la estocada final. Actualmente, la literatura iberoamericana se caracteriza por una diversidad de géneros y estilos narrativos que nada tienen que ver con su pasado glorioso, dijo el peruano Eduardo Benavides, que en su última novela, El asesinato de Laura Olivo, rinde homenaje a ese fenómeno cultural.

El bonaerense Enzo Maqueira, que presenta la novela Hágase usted mismo, aseguró que «el boom dejó de existir» pero de sus cenizas puede renacer «una nueva literatura» de la mano de las ideologías y de la revolución feminista. Fritz Glockner admitió que en México la realidad es tan cruel que ha desplazado a la novela negra, porque no se quieren leer los hechos truculentos que la crónica policial trae cada día. Por su parte, William Navarrete lamentó que varias veces se dio de bruces con el «no» de agentes literarios y editoriales a los que propuso publicar o importar obras de «buenos autores» con éxitos de venta en el exterior.