ARCO cerró ayer sus puertas con un balance «muy positivo», un incremento del 8% de visitas profesionales respecto al año anterior y un crecimiento del 3% de visitantes, que superan los cien mil asistentes a lo largo de las cinco jornadas de la feria. Unos datos que convierten a esta edición de ARCO en «la mejor de la última década», según la organización. «Ha sido una edición muy exitosa, la presencia de Perú como país invitado ha hecho que vinieran grandes coleccionistas de Latinoamérica, directores de museos y personas interesadas en los contenidos realizados en ARCO y eso ha sido muy satisfactorio», explicó Carlos Urroz, quien ayer se despidió como director de ARCO y da paso a Maribel López.

La nueva directora de ARCO, que no es ninguna extraña en este sector -ha codirigido esta edición y lleva trabajando con Urroz desde hace años-, explicó que en esta edición «se ha notado más que nunca la energía de gente que tenía ganas de comprar». «Las galerías nos han dicho también que han notado más la presencia de profesionales, con contactos para sus artistas y posibles exposiciones y eso es un equilibro estupendo, y es lo que buscamos», subrayó esta historiadora de Arte.

El número de visitas profesionales supone un incremento del 8% con respecto al año anterior, cuando se contabilizaron 35.887 personas. Un crecimiento que se ha visto favorecido por la gran afluencia de visitantes procedentes de América, muy especialmente de Latinoamérica y destacando Perú, desde donde han asistido alrededor de 700 profesionales, además de Brasil, Argentina, Colombia y México, entre otros. Junto a estos datos resalta igualmente la presencia de coleccionistas patronos y miembros de museos norteamericanos, especialmente de Nueva York como New Museum o Chelsea Art Group.