EL Real Monasterio de San Jerónimo de Granada, donde se ubica el sepulcro de Gonzalo Fernández de Córdoba El Gran Capitán, ha acogido el nombramiento de Antonio Iznájar de Castro como Comendador de la Imperial Orden Hispánica de Carlos V, como reconocimiento al mérito por sus aportaciones de carácter humanitario y cultural dentro del mundo académico, así como en el plano internacional por su trayectoria profesional en la consultoría de empresas.

La condecoración le fue impuesta en el acto oficial por Enrique de Borbón, tío del Rey Felipe VI, contando con la presencia de diversas autoridades civiles y militares.

En la historia de esta orden, íntimamente ligada a la cultura, han sido elegidos para ingresar destacadas personalidades del mundo de las artes y las letras, además de destacados dirigentes políticos, embajadores y diplomáticos, nobleza, militares y personalidades de la empresa.