"Hay un trasfondo de dignificar al diferente, al vulnerable, y, sobre todo, el valor de la fragilidad reconocida que te hace más fuerte. Yo era un niño muy vulnerable, muy, entre comillas, el que antes se iba a caer, y la vida ha demostrado que he sido el último en caer. Con lo cual, en vez de discriminar creo que hay que valorar mucho más lo distinto y lo diferente". Con estas palabras ha explicado este mediodía Alejandro Palomas, autor de 'Un hijo' (La Galera), algunos aspectos de su novela unos momentos antes de mantener un encuentro con el público, en la que ha sido su primera visita a la Feria del Libro de Córdoba.

Guille, el protagonista, expresa en el colegio su deseo de ser Mary Poppins. Lejos de tratarse de una historia de un niño infeliz, su creador explica que "el caso curioso de Guille es que es un niño feliz, dentro de unas coordenadas que supuestamente no deberían convertir a un niño en feliz, sino en infeliz. Eso es lo extraño de esta novela y lo que más llama la atención".

Con este libro, que en el pasado 2016 hizo a Palomas merecedor del Premio Nacional de Literatura Infantil y Juvenil, "se ríe, pero es una risa muy distinta a la risa que yo provoco con las novelas del resto de mi producción. Es una risa como mucho más tierna, porque son las salidas de un niño que te provoca mucha ternura, sobre todo, creo que es una novela que provoca mucha ternura", ha precisado.

En cuanto a la aceptación que esta obra está teniendo entre jóvenes y mayores, el escritor barcelonés ha admitido que "no fue escrita para el público juvenil. Esta novela era para adultos, tomó un poco ese túnel hacia ese tipo de público vete a saber por qué. Se ha convertido como en una novela familiar, que comparten padres e hijos, y distintas generaciones, y eso mola".

La actividad protagonizada por Alejandro Palomas, en la que precisamente ha destacado la asistencia de público juvenil, ha cerrado el programa de encuentros con los autores de la 44 edición de la Feria del Libro de Córdoba, que finaliza hoy.