El cantante malagueño Pablo Alborán, el artista que más discos ha vendido en España en la última década y también el que más gente llevó a sus conciertos en su anterior gira, ultima un nuevo tour que ha presentado a los medios justo cuando la reventa se ha colado en las agendas políticas. «Se han buscado mil maneras de controlarlo y no soy yo quien tiene la solución, pero lo que no quiero es que no se engañe a mi público. Las entradas tiene un valor exacto que hemos medido entre todos para que tenga sentido», ha dicho el artista a este respecto. Titulado igual que su cuarto álbum de estudio, Prometo, su nuevo tour echará a andar el próximo 1 marzo en Ciudad de México con unas previsiones gigantescas: 250.000 entradas vendidas en América y otras 350.000 en España, según su discográfica.

En Madrid quiso «enseñar la patita» de las dos horas de concierto que ha planteado, con «veintitantas» canciones de todos sus álbumes bajo un «sonido homogéneo» que le permita unificar sus raíces andaluzas (y francesas, por parte de madre) y las nuevas texturas más modernas que ha conquistado en su último disco. «Será un recorrido coherente, con medleys, adaptaciones de canciones y desnudos musicales, donde nos hemos ido a lo esencial para redescubrir algunos temas», ha anticipado. En cuanto a probar con el género urbano dijo: «No quiero pensar que el reguetón es un insulto porque hay algunas canciones maravillosas. Es música y estoy abierto a todo lo que sea aprender, siempre que no contenga vocabulario obsceno y se respete a la mujer», subrayó.