La apertura ayer de la Casa Murillo ha supuesto la inauguración de los itinerarios que llevarán a los visitantes a recorrer hasta una veintena de espacios en los que podrán conocer más de cerca la proyección artística del maestro y la imagen de la Sevilla del siglo XVII. El Año Murillo ha permitido convertir la planta baja de la sede actual del Instituto Andaluz de Flamenco en una casa museo dedicada a la vida y obra del autor, que se convierte así en «centro neurálgico» de la celebración para acercar al visitante la grandeza de su arte y la estela que dejó en la ciudad.

Casa Murillo, enclavada en el número 8 de la calle Santa Teresa, en pleno barrio de Santa Cruz, se ajusta a la tipología de casa palacio sevillana, con dos plantas, ático y un patio central con cuatro galerías y arquería de medio punto sobre columnas. Declarada Bien de Interés Cultural el 8 de marzo de 1995, la nueva imagen de Casa Murillo permitirá que el visitante no solo la visualizase como un museo sino como un centro de interpretación, adaptado a las nuevas tecnologías, en torno a la vida y obra del pintor sevillano.

Una vez que el visitante se adentra en el edificio, se topa con varias lonas que reflejan algunas de las obras más características de Murillo y que se despliegan automáticamente, informó ayer el Ayuntamiento. En este mismo espacio podrá disfrutarse de la proyección del audiovisual Murillo, el último viaje, producido por Talycual y dirigido por José Manuel Gómez Vidal, recientemente presentado en el Festival de Cine Europeo de Sevilla y premiado en el Festival de Cine Iberoamericano de Huelva.

El espectador podrá adentrarse en un viaje de ida y vuelta de una de las obras cumbre de Murillo, El joven mendigo, que regresó al Hospital de los Venerables, su lugar primigenio, con motivo de la exposición organizada por la Fundación Focus el pasado año.

Entre las reproducciones que podrán contemplarse en Casa Murillo destacan dos autorretratos del autor, la Inmaculada Concepción, La Anunciación, Tres muchachos, Santa Rosa de Lima, Santa Rosalía de Palermo, la Virgen y el Niño y Virgen del Rosario con el Niño.