La escena trap estaba dormida, dispersa y a la espera de un proyecto sólido que pusiese en el mapa a la ciudad como un escenario de artistas capaces de competir a nivel nacional. Así, en medio de esta vorágine que ha traído consigo la pandemia del covid-19 en el mundo de la cultura, NiceMusic renacía como ave fénix el pasado mayo cuando, tras el primer confinamiento, comenzó a funcionar a pleno rendimiento aunando los esfuerzos de artistas cordobeses de diversas disciplinas con un propósito común: revolucionar la música cordobesa.

Aunque NiceMusic nació en 2018 como un proyecto personal de Gonzalo Sáez, productor, vocalistas, letristas y técnico de sonido -ahora bajo el nombre artístico de Nice G-, el 2020 lo habría convertido en una idea común de futuro que, aunque liderada por Sáez, habría puesto a trabajar a productores, vocalistas, videomakers y artistas gráficos para ofrecer recursos a chicos con interés por el trap made in Córdoba. En palabras de Sáez, «NiceMusic es un colectivo que aspira a ser sello discográfico, que intenta ayudar a iniciarse a chavales con proyectos interesante y que aspira a crear un producto musical profesional, que termine permitiendo dedicarse a la música a aquellos que tengan talento y trabajen duro para ello».

Sáez se refiere a la chavalería que le acompaña en este camino como los NiceBoys, que hablan del proyecto como «lo mejor que le he pasado a Córdoba; un puente, un núcleo de unión». Entre ellos se encuentran Rafael González -LoveWhite -, José Del Pozo -StillEspiritudecalle-, Air Juan, Big Bonano, Agu Cabrón, Nico Vapor, Kaze, Custodio, TrackTSC y Guiri La Vaina, al mando de la gráfica y el merchan de NiceMusic. Paralelamente, NiceMusic también colabora con artistas cordobeses como Marina Rage -vídeo-, Aka Melosso -música-, Chaos Summoner -sonido-, entre otros.

La pandemia y el cambio

La pandemia, aunque Sáez confiesa no haber reflexionado demasiado sobre ello, ha supuesto un punto de inflexión para el colectivo que tras un primer confinamiento de parón absoluto, volvía con «muchas ganas e ideas» a pesar del hachazo que supuso el retraso de varios lanzamientos que estaban planeados para el pasado 4 de abril. «La cuarentena no era el momento para crear, ni para lanzar nada, no lo sentíamos así», explica. Aún así, cree, «las épocas difíciles siempre sacan los mejor de los artistas y aunque no se tradujo en una creación instantánea sí que se ha visto reflejada en lo que hemos estado haciendo después». Para el productor, la pandemia habría abierto paso a nuevos sonidos y habría predispuesto al público a «algo» que antes hubiese estado opacado por la hegemonía del reguetón. «La gente tiene más preocupaciones ahora, no todo es salir de fiesta y estar en la discoteca», sentencia.

Lo que es un hecho es desde mayo las ideas se han ido sucediendo, las publicaciones, los vídeos y los temas publicados y se han ido convirtiendo en cada uno «mejor que el anterior». Prueba de ello sería el reciente estreno de El sol se v de Air Juan y Nice G. En el que también han colaborado Chaos Summoner en la mezcla y la masterización, TrackTSC en los visuales y Guiri La Vaina en el diseño y el lettering.

Aunque 2020 será el año que los artistas de NiceMusic recordarán como el que cambio al colectivo, son varios los nuevos proyectos que se plantean para el 2021. Entre otros, asegura Sáez, «la creación de un público que entienda, respete, comparta y ame lo que hacemos». Según el artista, a Córdoba aún no le habría llegado el momento en el que esta música -especialmente la creada en el entorno local-tuviera un sitio. Además, recuerda, la crisis del covid-19 les habría robado la oportunidad de dar bolos que suponen gran parte de los ingresos de los artistas y música.

Para el próximo año, no solo les gustaría retomar los conciertos, sino que querrían publicar una mixtape colectiva e impulsar fiestas para seguir motivando el consumo de trap en la ciudad. También, en la línea del merchan, lanzado durante este 2020 en forma de camisetas, pegatinas y riñoneras, se plantea una colección completa de outwear diseñada por La Vaina, que refleje su pasión por el streetwear.